En la carrera del domingo su rendimiento tampoco estuvo al nivel del otro coche Red Bull y acabó a casi cuarenta segundos de la primera plaza. La situación empezaba a tornarse sospechosa, pero parece que la escudería austriaca ha encontrado por fin la respuesta al misterio.
Un chasis defectuoso
El director deportivo de Red Bull, Helmut Marko, ha asegurado en la televisión alemana RTL que "Mark tuvo algunos problemas con el chasis". Y eso hizo que el rendimiento de los neumáticos Pirelli no fuese el correcto: "Con él, ni los neumáticos duros ni los blandos realmente funcionaron. El desgaste de sus gomas fue también significativamente superior al de Sebastian".
En otro orden de cosas, Marko, al igual que Christian Horner, confirmó que en Melbourne no usaron para nada el sistema de Recuperación de Energía Cinética (KERS), pero que sí lo montarán en circuitos como el de Malasia o el de China: "Creo que vamos a usarlo en pistas que tengan una larga recta".
