Dominio de Mercedes en el FP1, la F1 cambió de escenario, pero el guion es el mismo

Como cualquier viernes de Fórmula 1, hasta el momento al menos, lo habitual es que la primera jornada del fin de semana arranque los viernes con la disputa de las dos sesiones de entrenamientos libres. Veremos si esto cambia en el futuro, pero centremos la atención en el ahora, pues el Gran Circo tenía todo listo para dar luz verde a la primera sesión del Gran Premio de Baréin. Con los dos títulos decididos y ya otorgados esa batalla ya es pasado. Sin embargo, nadie quiere dejar pasar la oportunidad, todos quieren seguir pisando el acelerador hasta el final. Aún hay varias luchas abiertas, el subcampeón de pilotos no está decidido, tampoco el tercer clasificado de constructores. La batalla por el tercer puesto de la clasificación de constructores está igual de emocionante que siempre.

Primera media hora de sesión

Todos los pilotos salían rápido a la pista del desierto, había prisas por salir a rodar y empezar a familiarizarse con el trazado. Nos sorprendía que algunas gotas estaban cayendo y el pronóstico fijaba un 40% de posibilidades. La gran mayoría de los pilotos en pista dedicaban estos primeros minutos de la sesión a probar los neumáticos experimentales de 2021. Puesto que Pirelli había traído para el día de hoy dos juegos por cabeza del compuesto C3, el fin era emplearlo para tandas de al menos 6 vueltas, para recabar la mayor cantidad posible de información. Tras un arranque con mucha actividad en pista, superados los primeros 20 minutos muchos ponían rumbo a los garajes. Relativa calma sobre el asfalto, el que no perdía detalle de su monoplaza era George Russell, pues había cedido su coche a Roy Nissany para estos entrenamientos libres 1. Alexander Albon se ponía al frente de la sesión cuando acababa la primera media hora de esta sesión.

Segunda media hora de sesión

Este periodo de la sesión comenzó a aumentar la presencia de pilotos sobre la pista, pero también los errores de algunos que trataban de buscar los límites en cada metro del trazado. Vimos trompos de Charles Leclerc y Romain Grosjean, las ruedas de este último fueron directas al cubo de la basura, totalmente destrozados e inservibles. Al igual que sucedía en la primera media hora, alcanzados los 45 minutos la sesión se plagaba de tranquilidad. Solo tres coches se quedaban fuera y haciendo los deberes sobre el asfalto. A punto estuvo Lando Norris de seguir los pasos de Leclerc y Grosjean, pero se libró del trompo y controló el monoplaza de forma brillante en el último segundo. Después hubo una pequeña batalla por la primera posición, Gasly se ponía al mando de la sesión, pero pronto Bottas rompía la barrera del 30. Aunque no tardaba en entrar Hamilton en escena para apartar a todos de ese número 1 que le pertenece. En ese momento eran 13 los pilotos presentes sobre el asfalto, todos tratando de hacer los deberes de esta primera toma de contacto con el asfalto del desierto.

Última media hora de sesión

Esta parte de la sesión comenzaba con una nueva salida de pista de un Haas, Grosjean volvía aprobar la arena del desierto. Afortunadamente para él y para el equipo sin consecuencias. Giovinazzi apuntaba tener problemas de sincronización en las marchas, parece que se solucionaron tras una rápida parada en el box. La zona media estaba más que ajustada, tras los Mercedes había un bloque de pilotos en la misma décima, la pelea parece más que ajustada. Como en las dos mitades anteriores, la dinámica se repetía en el tercer tercio, tranquilidad relativa y trabajo en la sombra, todos los que estaban en pista rodaban con calma para completar sus programas y recabar el máximo posible de información. Nueva salida de pista de Charles Leclerc, el monegasco de Ferrari culpó de su salida a Pierre Gasly, pero el de Alpha Tauri solo estaba haciendo su trabajo. Parece que el de Ferrari se acercó en exceso al de Faenza y eso le hizo perder el control, no hay margen para tanta queja en unos Libres 1. Con la mayoría de pilotos en pista la sesión se acercaba en su final. Max Verstappen estaba en el garaje y sus hombres trabajaban en el fondo plano del monoplaza, parece que algo se había dañado en la parte trasera del bólido del neerlandés. Todo apuntaba a que la sesión acababa así para el hombre de Red Bull. La bandera a cuadros ondeaba en el desierto sin mucho más que añadir, el dominio de Mercedes volvió a ser una realidad.