Mercedes encara el Gran Premio de Mónaco 2018 de Fórmula 1 de la mejor manera posible, y es que en Barcelona no solo lograron el primer doblete de la temporada, sino que además recuperaron el liderato del Campeonato de Constructores, que hasta entonces se encontraba en manos de Ferrari. A pesar de ello, el jefe de la escudería de Brackley, Toto Wolff, se muestra muy cauteloso de cara a Montecarlo, pues es consciente de que el trazado catalán era muy favorable a las prestaciones de sus monoplazas, sin embargo, en el Principado las condiciones serán diferentes. No hay que olvidar que el año pasado las cosas no fueron demasiado bien para los pupilos del equipo alemán, ya que ninguno de los dos pilotos fue capaz de subir al podio (Bottas 4º y Hamilton 7º), algo que esperan no repetir en la presente campaña.
"Nuestro primer 1-2 de la temporada en Barcelona fue genial. El coche fue rápido, preservó bien sus neumáticos y ambos pilotos fueron positivos respecto al equilibrio y el manejo. Pero no estamos pensando en ello como un punto de inflexión: el diseño de la pista, la superficie y las condiciones se adaptaban a nuestro coche y jugaban a nuestro favor. Por lo tanto, nos mantenemos cautelosos con nuestras predicciones cuando nos dirigimos a Mónaco. Es un circuito que nos ofrece desafíos completamente diferentes, y también únicos. El año pasado se convirtió en un fin de semana de limitación de daños cuando no fuimos capaces de encontrar la configuración correcta. Fue una lección dolorosa para nosotros y estamos decididos a demostrar que la hemos aprendido este año", asegura el austriaco en declaraciones publicadas en la Web del equipo.
La presión recae sobre sus rivales más directos
Por otro lado, Wolff no duda en señalar a Ferrari y a Red Bull como favoritos de cara a la prueba monegasca, pues destaca que la escudería italiana es muy fuerte en este escenario, ya que dominó con claridad la temporada pasada (consiguió un doblete), y además señala que los hombres de Milton Keynes contarán con gran ventaja en este trazado debido al predominio de las curvas de baja velocidad y a la ausencia de largas rectas que exijan una buena velocidad punta: "No nos dirigimos a este fin de semana como favoritos, sino que en esta ocasión lo son Red Bull y Ferrari. Red Bull es fuerte en las curvas de baja velocidad, y en Montecarlo la velocidad en línea recta es menos importante, mientras que Ferrari dominó el año pasado", explica.
"Nuestro trabajo es llevar a cabo un programa de prácticas fluido, aplicar nuestro aprendizaje de carreras recientes y maximizar el potencial del monoplaza, sea el que sea. Ahora estamos comenzando el 'corazón' de la temporada, con siete carreras por delante en los próximos diez fines de semana. Vamos a competir en una amplia gama de circuitos antes de las vacaciones de verano, con carreras cada vez más densas y rápidas. Esto pondrá a prueba al equipo y lo llevará hasta sus límites, y cualquier debilidad será duramente castigada en los puntos. Somos claros sobre el desafío que tenemos por delante y estamos decididos a prevalecer en las próximas citas", concluye.
