El año 2022 supondrá un salto de calidad para George Russell, que dejará atrás Williams para adentrarse en una nueva etapa junto a Mercedes. El equipo alemán ha confiado en él para formar pareja con Lewis Hamilton en una temporada que promete emociones fuertes con el cambio de normativa. El joven británico llegará a su nuevo destino con ilusión y ganas de aprender, pero también con ambición. Y precisamente en este último punto es donde ya están trabajando Toto Wolff y compañía. El jefe de los germanos asegura que está manteniendo conversaciones con el que será su pupilo para prepararle de cara a una nueva etapa que será de todo menos fácil. Aparte de lidiar con uno de los mejores pilotos de la parrilla, Russell tendrá que hacerlo con la presión de pelear en un monoplaza candidato a todo, y esto será algo nuevo para él. De igual modo, el de Viena quiere evitar que se repitan situaciones como las del pasado. A todos se nos viene a la cabeza el año 2016 con Hamilton y Rosberg. Aún es pronto para vaticinar qué puede ocurrir en el garaje alemán la próxima campaña, pero lo que está claro es que desde el equipo quieren dejarlo todo atado para evitar confusiones y, por ende, posibles confrontaciones internas.
Se vienen emociones fuertes
"George ha demostrado que merece estar en uno de los mejores coches y ahora tenemos que adaptarle a la situación de Mercedes. Habrá mucha más presión. Tendrá un compañero de equipo increíble que posee los récords más impresionantes. Es importante que le preparemos y que le calibremos correctamente. En el pasado presenciamos situaciones en las que los pilotos fallaron. Lewis estuvo en una situación que creo que la escudería no supo comprender del todo bien cómo podía ir. Considero que ahora estamos mejor preparados para esa situación pero, sea como sea, George cuenta con la ambición para ser un campeón del mundo en potencia, y Lewis también la tiene. La calibración lo es todo. Está claro que nunca pondremos en el monoplaza a un piloto sin la ambición de darlo todo y forzar a su compañero, sin las ganas de ganar carreras y títulos. Puedo ponerme en su lugar, por lo que estoy hablando con él sobre lo que supone para la dinámica del equipo, sobre lo que podría ser y sobre cómo tenemos que mantener la inercia del equipo. Él es muy inteligente y lo entiende", ha expresado el austriaco en palabras para la web de la máxima categoría del automovilismo.
