Tras el anuncio de su adiós a Racing Point y el devenir de las coyunturas del resto de equipos, muchos se hacían a la idea de que Sergio Pérez no iba a a estar en la parrilla de la categoría reina del automovilismo este año, sin embargo, un golpe maestro de Red Bull hizo que las tornas dieran un vuelco de ciento ochenta grados. El piloto mexicano nunca lo ha tenido fácil en la Fórmula 1, y es que después de desperdiciar su oportunidad junto a McLaren en el año 2013, se vio relegado a un segundo plano que parecía no tener fin, pero de repente el 2020 le dio la oportunidad que llevaba tiempo esperando, ya no solo de mostrar una gran parte de su talento, sino de subirse por primera vez al escalón más alto del podio y disfrutar del éxito que le debía la categoría. Ahora, el de Guadalajara echa la vista atrás, habla de su notable evolución y valora sus posibilidades junto a Red Bull en su nueva etapa.
Vaivén de emociones
"He cambiado mucho desde 2013, tanto a nivel de comprensión como de experiencia, así como en el apartado técnico. Estoy bastante convencido de que todo irá bien este año y tendremos una temporada muy exitosa. Esa es la única forma de compensar a Red Bull por darme la oportunidad de estar en un gran equipo. Quiero asegurarme de poder ayudarles a dar un paso adelante, hacer pasar un mal rato a Mercedes y, con suerte, vencerles. Sería muy bueno para nosotros conseguir el título en la última temporada de Honda. A lo largo de mi carrera en F1, he tenido grandes años pese a acabar séptimo o similar en el Mundial. He trabajado muy duro año tras año, sin darme por vencido, siempre esforzándome al máximo, y finalmente tuve la opción de mostrar un poco más. La gente vio de lo que soy capaz, pero mi gran oportunidad es ahora. Tengo que pasar al siguiente nivel, mejorar en todos los aspectos, y creo que estoy preparado para ello. Lo único que me faltaba era la oportunidad. Ahora que la tengo, depende de mí hacer que funcione", ha explicado para el Podcast Talking Bull.
