El Gran Premio de Turquía había sido uno de los más complicados, por no decir el que más, para los pilotos y los equipos. El reasfaltado había sido el principal dolor de cabeza para ellos, ya que era prácticamente imposible competir sin tener sustos, trompos o salidas de pista. Aunque haya sido un claro hándicap para todos, ese factor incrementó el espectáculo durante todo ese fin de semana. Además, la meteorología también había entrado en juego lo que había complicado aún más las cosas, por si no fuera suficiente con las condiciones que estuvieron lidiando en los entrenamientos del viernes. La falta de agarre había sido el motivo de quejas, pero Ross Brawn defiende que este estado de la pista estaba provocado por la tardía decisión de competir allí para tener una cita más en el calendario.
Organización perfecta del GP en Estambul
"Los organizadores del país han hecho un trabajo fantástico para poner el circuito en una posición para albergar un Gran Premio sensacional. Comprendo que los pilotos no estuvieran contentos con los niveles de agarre, pero fue una consecuencia de la decisión tardía de competir allí porque el calendario se ha revisado para reaccionar a la pandemia. Pienso que los pilotos, a veces, necesitan recordar que esto es una competición y era lo mismo para todos. Algunos pilotos agacharon la cabeza y se adaptaron a las condiciones y otros lo encontraron como una distracción. Haber tenido una superficie desafiante no ha sido algo malo, lo que demuestra el talento de los pilotos al máximo. Simplemente, la competición necesita ser justa, equitativa y darles las mismas oportunidades", concluyó Ross Brawn en palabras recogidas en la página de la F1.