La hegemonía de Mercedes en la era híbrida parece verse seriamente amenazada esta temporada. Y es que Red Bull puso contra las cuerdas a los de Brackley en la primera cita del año. El equipo austriaco dominó en las jornadas de viernes y sábado de la mano de Max Verstappen y rozó la victoria el domingo. Es tal la amenaza que el máximo responsable de las flechas plateadas -desde el año pasado tintadas de negro-, Toto Wolff, no duda en afirmar que a día de hoy su rival directo es el más fuerte de la parrilla, ya que dominó en un trazado que a priori no es propicio para su monoplaza, por lo que podría ser más difícil de batir en futuras pruebas. No obstante, el de Viena se muestra satisfecho con el rendimiento mostrado en Baréin y el paso adelante en comparación a los test, de los cuales salieron repletos de dudas.
Emocionante batalla
"Baréin no siempre fue la carrera más fuerte para los hombres de Red Bull, y la verdad es que tampoco han sido particularmente buenos en los inicios de temporada. El fin de semana pasado dejaron patente que se ya no es el caso en 2021, de modo que no me cabe la menor duda de que son extremadamente difíciles de superar. Ellos son los que lideran la parrilla ahora. Nos encontrábamos a cuatro décimas de distancia en la clasificación, lo cual supone una gran diferencia muy difícil de recuperar. Todavía nos falta bastante ritmo en la qualy. Pese a ello, creo que éramos competitivos. Definitivamente, nos recuperamos bien de los test. No obstante, siendo 100% sincero, todavía nos falta bastante ritmo los sábados", ha señalado en palabras recogidas por el portal de Fórmula 1.
