Sin apenas descanso, la Fórmula 1 se traslada este fin de semana al circuito de Hungaroring (Hungría) para abordar la duodécima prueba puntuable del Campeonato 2019 de Fórmula 1; última antes del parón vacacional. Como ya sucediera en Alemania, Pirelli opta por las gamas C2 (duro), C3 (medio) y C4 (blando) de sus compuestos para esta cita. Este trazado, que cuenta con la media de velocidad más baja del calendario, es exigente con las gomas (aunque la degradación es baja) debido a la sucesión constante de curvas, que prácticamente no deja espacio a los neumáticos para enfriar sus bandas de rodadura. Del mismo modo, la temperatura térmica es una de las más altas del año (un hándicap para Mercedes), lo cual incrementará la degradación térmica. Para esta prueba, los equipos deberán aplicar una configuración de alta carga aerodinámica a sus monoplazas con el fin de aumentar el apoyo en la larga sucesión de curvas.
En 2018, la estrategia predominante fue la de una sola parada. El ganador del Gran Premio, Lewis Hamilton, se detuvo una vez en boxes, concretamente en la vuelta 25, para deshacerse del por aquel entonces neumático ultrablando y montar el blando, de modo que ni siquiera tuvo que decantarse por el compuesto más duro para llegar al final de la carrera. Junto a él, se subieron al podio ambos Ferrari, aunque a una distancia de casi 20 segundos. Unos números que dejan poco optimismo en el entorno italiano de cara a la cita, aunque las altas temperaturas podrían jugar en contra de la escudería de Brackley, que en esta campaña ya ha demostrado que no rinde bien cuando el asfalto enardece demasiado.Back to back #F1 weekends!
? Pirelli Motorsport (@pirellisport) July 29, 2019
Next up the #Fit4F1 #HungarianGP ??: https://t.co/VVpBchCeC2 pic.twitter.com/RqPXE2vKXc
Mario Isola, responsable de Pirelli en la Fórmula 1:
"Hungría marca el último Gran Premio antes del parón veraniego, y lo hace con un desafío interesante, tanto física como estratégicamente. Los adelantamientos aquí son complicados debido a la estrecha trazada, fuera de la cual es muy fácil deslizar y salirse del asfalto, por lo que la posición en pista es clave, algo a considerar a la hora de definir la estrategia correcta. Hungaroring es el típico lugar en el que una buena táctica, unida a un coche muy ágil en curva, puede llevar a dar alguna sorpresa, como ya hemos comprobado en algunas ocasiones en tiempos recientes. El año pasado, con una nominación de compuestos casi idéntica a la actual, se apreciaron diferentes opciones estratégicas después de una sesión de clasificación marcada por la lluvia. Ojalá podamos asistir a la misma variedad táctica este fin de semana".