Silverstone acogerá este fin de semana la décima prueba puntuable del Campeonato 2019 de Fórmula 1. En esta ocasión, y por tercera vez en lo que va de temporada, Pirelli ha optado por los compuestos más duros de su gama para el Gran Premio (C1, C2 y C3). Uno de los grandes alicientes de esta prueba será ver cómo se comportan las gomas en el nuevo asfalto, que ha sido modificado con el objetivo de optimizar el drenaje y acentuar los peraltes. Esto abrirá una nueva ventana para todos, ya que hasta que los monoplazas no salten a pista el viernes, se desconoce cuál será el funcionamiento de las ruedas. Todo apunta a que la nueva superficie permitirá completar la vuelta en menos tiempo, de modo que es probable que este año se vuelva a batir el récord de la pista.
El mítico circuito de Silverstone es uno de los favoritos para la gran mayoría de pilotos de la categoría debido a su combinación de curvas rápidas, lo cual se traduce en una de las cargas energéticas más elevadas de todo el año. El punto más destacado del trazado británico es la secuencia Maggots, Becketts y Chapel, donde los pilotos van con el pedal de gas a fondo. Del mismo modo, en este escenario cobra más importancia la capacidad energética lateral que la tracción o la frenada, aunque también hay algunos tramos más lentos y técnicos. En 2018 Ferrari se llevó la victoria de la mano de Sebastian Vettel, y además se alzó con un doble podio, por lo que los antecedentes son positivos para los de Maranello, que necesitan sí o sí una victoria para tratar de reengancharse a la lucha por el título.#BritishGP Teams' tyre choices for Silverstone are out https://t.co/t7mVrl6dNE#Fit4F1 pic.twitter.com/T9nq882mfM
— Pirelli Motorsport (@pirellisport) 2 de julio de 2019
Mario Isola, responsable de Pirelli en la Fórmula 1:
"El circuito ha sido reasfaltado de manera reciente, por lo que será interesante comprobar qué efecto tendrá esta circunstancia en la competición, y es que podríamos encontrarnos ante un trazado mucho más rápido. Hemos optado por la misma elección de compuestos del año pasado, que debería adaptarse a las exigencias en curva del trazado, una de las más altas del año y parecida a la de pistas como Spa o Suzuka. La suma del nuevo asfalto y la variable meteorología británica nos sitúa ante numerosas incógnitas de cara a la cita anual de la Fórmula 1 con Silverstone, y además hará más importante de lo habitual la recopilación de datos durante las sesiones de entrenamientos libres, sobre todo pensando en la estrategia de carrera".