Esta pista de Zandvoort ha supuesto un verdadero reto para los pilotos desde los primeros entrenamientos tanto por los sustos como por las constantes interrupciones. Los errores de pilotaje y los fallos de fiabilidad habían sido los principales inconvenientes a lidiar, cuya consecuencia había sido que el tiempo para rodar fuese limitado. Como este trazado no cuenta con amplias escapatorias, cualquier error se paga caro ya sea por la grava o por los muros. Desde Pirelli, Mario Isola considera que estos factores vistos en las prácticas podrían estar presentes en las sesiones posteriores. En cuanto a la diferencia de los neumáticos llevados para esta decimotercera cita del calendario, la distancia entre el Blando y el Medio se estima que esté cercano a las siete décimas, mientras que entre el Blando y el Duro es superior al segundo. Habrá que tener en cuenta muchos factores de cara a la clasificación y a la carrera en este fin de semana.
Mario Isola, responsable de Pirelli:
"Hubo una bandera roja en cada sesión, incluyendo los Libres y la clasificación de Fórmula 3, lo cual limitó el rodaje e hizo que fuera más difícil sacar conclusiones fiables. La pista también estaba bastante sucia por la arena y la grava. Sin embargo, los equipos lograron obtener algunos datos que necesitaban sobre esta pista única. Esta ha sido una preparación útil porque los coches de seguridad y las banderas rojas pueden ser una posibilidad durante la carrera. Habrá más trabajo el sábado con el fin de tener una idea más clara en cuanto a la estrategia. Tuvimos una buena idea sobre la diferencia entre el Medio y el Blando, aunque no hubo datos suficientes para predecir la distancia entre el Medio y el Duros. A pesar del peralte de Zandvoort, los neumáticos son exactamente los mismos que llevamos a las otras carreras, con la última estructura introducida en Silverstone".