Paso a paso, Toro Rosso está ganando constancia en el Campeonato de Fórmula 1. El equipo italiano comenzó el año con grandes problemas que ha ido solucionando con el transcurso de las carreras, lo que le ha permitido ganar en competitividad y rendimiento, siempre ayudado por las buenas labores realizadas por Honda. Ahora, la escudería de Faenza deberá afrontar una complicada prueba en Monza, pista donde serán los anfitriones y en la que deberán demostrar la evolución que parecen haber logrado de un tiempo a esta parte. Los dos pilotos del equipo, Pierre Gasly y Brendon Hartley, son conscientes de que este próximo fin de semana no se presenta, a priori, favorable para sus intereses, aunque como ya sucedió en Spa, cualquier cosa puede suceder sobre el asfalto.
Del mismo modo, ambos recuerdan con buenas sensaciones su paso por Monza en otras categorías, aunque admiten que su participación subidos en un Fórmula 1 será muy diferente a lo experimentado hasta ahora. Además, destacan la exigencia de este circuito con la velocidad punta, lo cual les ha llevado a elegir una especificación con baja carga aerodinámica para ganar velocidad en las rectas.
Pierre Gasly (13º - 28 puntos):
"Llegué a Italia a comienzos de semana, visité la fábrica de Toro Rosso y ahora estoy ansioso por llegar a Monza, incluso aunque sea un fin de semana complicado para nosotros. Spa también fue un fin de semana difícil, pero trabajando duro logramos aprovechar al máximo todas las oportunidades para volver a terminar en la zona de puntos. Tengo buenos recuerdos de la pista de Monza, ya que estuve en la Pole Position durante mis dos últimas carreras allí, pero este año supondrá un desafío en un coche de Fórmula 1. Será algo nuevo experimentar las velocidades más altas en un coche de esta categoría en la que es la pista más rápida del año. Los ingenieros me dicen que con DRS deberíamos superar los 360 kilómetros por hora".
"Va a ser una sensación increíble correr por las rectas y luego llegar a las zonas de frenada. Realmente tienes la sensación de velocidad, y esa es una de las cosas que hacen que este circuito sea tan especial. Tendremos un paquete aerodinámico de baja carga en comparación con la normal, lo que significa que deslizaremos un poco más en pista, algo que es positivo, ya que la clave en Monza es ser rápido en las rectas. Pasas casi el 80% de la vuelta pisando a fondo, de modo que es importante no perder velocidad a través de las chicanes, lo cual deriva en hacer un buen trabajo al andar sobre los bordillos y luego tener una buena tracción en las curvas. Espero con ansias nuestra última carrera del año en Europa, y deseo que podamos ir bien en el Gran Premio de casa de nuestro equipo, con muchos compañeros viniendo desde la fábrica al circuito para apoyarnos a lo largo del fin de semana".
Brendon Hartley (19º - 2 puntos):
"He tenido cierto éxito en Monza en el pasado, ya que gané una carrera allí en Fórmula Renault 2.0 en mi camino hacia el Campeonato Europeo, hice podio en Fórmula 3 y también recuerdo haber probado allí en LMP1, aunque nunca corrimos. Monza tiene una gran historia, lo que significa que puedes sentir una atmósfera especial tan pronto como llegas al trazado, y estoy deseando conducir un Fórmula 1 allí por primera vez. La pista es famosa por las altas velocidades que alcanzas y, como piloto de F1, definitivamente te vuelves insensible a estas velocidades, porque estamos yendo muy rápido la mayoría del tiempo. La amortiguación y la suspensión son tan buenas ahora que los coches se han vuelto bastante estables, lo cual también hace que las altas velocidades sean menos obvias, pero creo que en Monza, la chicane de Ascari, la Parabólica y las frenadas a más de 350 kilómetros por hora van a ser una gran experiencia, corriendo con la carga aerodinámica más baja posible, dado que todos los equipos traen un paquete aerodinámico específico de este circuito y, por lo tanto, los coches serán diferentes para todo el mundo".
"De hecho, creo que incluso creará mejores carreras, porque tenemos menos carga aerodinámica que perder cuando estamos siguiendo otros coches. Las distancias de frenada serán más largas con menos carga, un aspecto que crea más oportunidades de adelantamiento, sobre todo porque es más fácil bloquear los frenos delanteros. Supongo que de alguna manera será un poco más desafiante para nosotros, y seguramente será agradable. El clima también puede ser en ocasiones un factor. Es una pista que estoy esperando. Va a ser una carrera de casa para nosotros en Toro Rosso, así que espero ver muchas banderas tricolores entre todas las de la grada".