El pasado Gran Premio de Gran Bretaña ha sido uno de los más complicados para Williams de la temporada. A pesar de competir en casa, durante ese fin de semana parecía que no ha sido una motivación sino un calvario. Desde los primeros entrenamientos libres, tanto Lance Stroll como Sergey Sirotkin sufrieron salidas de pista lo que provocó que saltaran las alarmas. Dentro del equipo informaban que se debía a un contratiempo con el DRS haciendo que perdiera carga aerodinámica cuando entrada a las curvas y, por eso, trompeaban continuamente durante las prácticas del viernes y del sábado. Durante esta cita, la escudería británica no pudo luchar por absolutamente nada ni en clasificación ni en carrera en la que terminaron últimos.
Paddy Lowe, director técnico de Williams, ha destacado los graves problemas que ha tenido el FW41 en el circuito de Silverstone en el que ni fueron competitivos ni tuvieron estabilidad en el coche. El ingeniero inglés reconoce que es algo 'catastrófico' y que necesitan entenderlo cuanto antes para encontrarle alguna solución. Lo que pensaron, después de los numerosos incidentes, fue que no utilizaran el DRS en lo que quedaba de fin de semana pero no era una opción ya que de esa manera no podrían competir contra sus rivales directos.
El DRS fue el inconveniente
"Fue un fin de semana muy duro, salir desde el pit lane con ambos coches no fue una buena solución, fue una nueva experiencia que esperamos que no se repita. Es un problema intermitente pero es bastante catastrófico. En esa situación, fue una pérdida extrema de carga aerodinámica lo que no es seguro. Pudimos considerar el competir sin usar el DRS pero no era la manera de competir. Necesitamos entenderlo, ahora mismo no tenemos respuestas por lo que queremos hacer algunas valoraciones. No creo que haya algo mal con el alerón trasero".
