La pandemia había provocado que el cambio de normativa previsto para esta temporada se tuviera que posponer a la siguiente para dar más tiempo de preparación a los equipos. Con este suceso, esa revolución en la categoría tenía que esperar. A uno que le ha fastidiado los planes había sido a Nicholas Latifi, una vez había firmado por Williams para 2020. Era consciente que su primer año como debutante sería difícil por las recientes campañas de sufrimiento para la escudería de Grove, pero tenía la esperanza de que hubiera un giro de 180 grados en 2021, el cual no llegará como esperaba. A pesar de todo, mira el lado positivo y sabe que esta etapa le ayudará para mejorar como piloto y estará listo cuando tenga un monoplaza más competitivo. Debido a este cambio de planes, el canadiense está obligado a esperar un año más y seguramente con un coche con el que no se sienta cómodo para aspirar a las posiciones de más arriba. Para 2022, Williams debería dar un paso adelante si aprovechan esta valiosa oportunidad para hacerlo bien.
Revés al estar al final de la parrilla
"Era una de las personas que estuvo muy decepcionada cuando se decidió que la nueva normativa se retrasaba hasta 2022. Cuando firmé por el equipo, conocía cuál era la situación allí. Sabía que 2020 sería un año difícil, pero 2021 iba a tener un nuevo coche y habría un cambio de normativa, lo que sería una oportunidad. No esperaba tener el coche más rápido de repente, aunque todos no comienzan desde cero. Desafortunadamente, este es otro año en el que tendremos el coche y sufriremos más de lo que queríamos".
"Todo esto solo hará que mejore como piloto ya que no es el monoplaza más sencillo de pilotar, tienes que trabajar incluso más detrás del volante al contrario de si tuvieras uno que hace lo que quieres. Ojalá podamos estar en una posición en la que seamos más competitivos y luchemos por puntos con más consistencia. No era lo que esperaba cuando firmé, pero es la misma situación para todos", había finalizado el canadiense en palabras para GP fans.
