El fin de semana de Red Bull en Australia fue más que satisfactorio tras el inesperado podio de Max Verstappen, que logró batir en pista a Sebastian Vettel para finalmente alcanzar el tercer puesto, sin embargo, los hombres de Milton Keynes aún tienen un gran trabajo por delante si quieren luchar de tú a tú por las victorias. Y es que, según afirma su asesor, Helmut Marko, el punto débil de la escudería austriaca en estos momentos es el chasis, ya que todavía no está al nivel esperado. Algo de lo que culpa a Pierre Gasly, quien provocó graves daños en el monoplaza al sufrir un fuerte accidente en los test de pretemporada, los cuales tuvieron lugar en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Aun así, asegura que este problema se solucionará en un periodo corto de tiempo, de modo que los aficionados pueden estar tranquilos.
"Tuvimos un fin de semana ideal en Melbourne en lo que al motor se refiere, ya que funcionó bien desde el primer día hasta la carrera, y también en lo relacionado a la adaptación, la manejabilidad y demás. Respecto al chasis, aún tenemos carencias, pero es algo normal teniendo en cuenta que nunca pilotamos con el paquete completo en Barcelona después de que Pierre Gasly destruyera piezas clave de las que no teníamos repuestos. La verdad es que nos fastidió. Eso se reflejó en la tercera sesión de entrenamientos libres con Verstappen, ya que de la tercera a la cuarta curva los neumáticos se volvieron locos. Era como un coche de rallycross. A día de hoy estamos lejos de tener un chasis óptimo, pero no es algo que no se pueda solucionar en poco tiempo", ha comentado en declaraciones concedidas al portal web estadounidense Motorsport.
Sin dominador claro en el aspecto del motor
Por otro lado, Marko no ha querido vaticinar qué equipo cuenta con mayor potencia en su motor a día de hoy, pues asevera que Albert Park no es un circuito que brinde un reflejo real de la situación. Del mismo modo, explica que solo algunos trazados concretos permitirán sacar conclusiones acerca de ello: "Quizás Mercedes no sepa por qué estuvieron delante en Melbourne. Vamos a llamarlo 'el efecto Melbourne'. La temperatura de la pista estaba entre 40 y 44 grados, por lo que había 15 grados más que en Barcelona. Creo que solo vamos a ver el equilibrio de potencia exacto en circuitos como Baréin y China", ha proseguido.
Entretanto, el ingeniero de Graz no ha dudado en asegurar que desde Red Bull están dispuestos a hacer frente a una penalización si con ello logran implantar un mayor número de caballos mediante una unidad de potencia extra, pues estos pueden ser cruciales a la hora de pelear en la zona alta de la tabla junto a Mercedes y Ferrari: "Honda está desarrollando a un gran nivel. Si después del tercer motor vemos que tenemos más caballos a nuestra disposición, no vamos a dudar en montar el cuarto. Si eso nos da 10 ó 15 caballos más, aceptamos la penalización", ha señalado a modo de conclusión.
