Continúa la controversia en torno a los alerones traseros de algunos equipos. En el pasado Gran Premio, disputado en el Circuit de Barcelona-Catalunya, tanto la escudería Mercedes como Lewis Hamilton vertieron quejas por la gran moldeabilidad que mostraba el alerón trasero del RB16B en las rectas y curvas rápidas. Unas críticas que ganan protagonismo ahora que llega el turno de viajar a Mónaco para disputar una nueva prueba. El asesor de Red Bull, Helmut Marko, se ha defendido de las quejas de sus rivales apoyándose en Alfa Romeo y Alpine, especialmente en este último, que gracias a las modificaciones en el alerón de su A521 ha ganado velocidad en rectas. Además, asegura que todos los elementos con los que cuenta el monoplaza pilotado por Max Verstappen y Sergio Pérez son legales.
Hay que recordar que la FIA anunció la semana pasada que iban a endurecerse los test de flexibilidad, por lo que deberemos esperar para ver si estos tienen efecto directo en alguna decisión de los equipos antes mencionados: "Nuestro alerón trasero ha pasado toda las pruebas de carga que se exigen. En estos momentos, hay un nuevo criterio que tiene diferentes parámetros con respecto a la carga aerodinámica. Es lo que suele ocurrir cuando se introducen regulaciones nuevas y las escuderías descubren áreas confusas, no obstante, no somos los únicos, ya que esto afectará a otros equipos. Tanto Alpine como Alfa Romeo están utilizando alerones traseros que se flexionan a alta velocidad. Ellos también se verán obligados a hacer cambios", ha señalado en una entrevista concedida al medio 'Motorsport-Magazin'.
Años con el mismo debate
Por otra parte, Marko ha querido recordar que en la etapa dominante de Sebastian Vettel ya se vieron obligados a reajustar el alerón delantero en diversas ocasiones debido a las quejas de sus rivales más directos, de modo que para ellos no supondría un hándicap volver a hacerlo: "La razón por la que nos decantamos por un alerón trasero más pequeño fue porque éramos demasiado lentos en las rectas. Después de hacerlo, Hamilton vio, mientras rodaba por detrás de nosotros, que éramos bastante rápidos al reducir la carga del alerón. Fueron dos cosas que se juntaron a la vez. Ya en el pasado tuvimos que reajustar los alerones delanteros dos o tres veces por temporada durante nuestro periodo exitoso en la Fórmula 1. Puedo asegurar que todo esto no es un inconveniente que sea decisivo para el Mundial. Nuestra lucha con Mercedes seguirá. No somos como BMW, que en el año 2008 dijeron que su plan era ser campeones del mundo el próximo año. No tenemos ese pensamiento, sino que hemos planeado actualizaciones hasta las vacaciones de verano y luego veremos dónde estamos", prosigue.
En lo que respecta a uno de sus pupilos, Max Verstappen, el de Graz admite verle mucho más maduro tanto sobre el asfalto como a la hora de controlar las emociones, lo cual es realmente importante para un piloto que a día de hoy es candidato a pelear por la corona, al contrario de lo ocurrido en anteriores ocasiones, cuando Red Bull no fue capaz de brindarle un coche ganador: "Max está muchísimo más relajado de lo que ha estado en mucho tiempo. Únicamente se cabreó en Portimão, y fue porque consiguió la pole y se la quitaron. El de ahora es un Max mucho más maduro. Por ejemplo, el viernes en Imola tuvo el problema con el eje de la transmisión. Antes hubiera gritado como un gorrión de pipa. Somos conscientes de que ha estado compitiendo durante un tiempo relativamente largo con un material inferior frente a Mercedes y Lewis Hamilton, sin embargo, ahora esta situación ha cambiado gracias a Honda. Los hombres de Ferrari, en su día, también estuvieron luchando con Mercedes, pero hubo otras razones. En la era híbrida, el motor Mercedes siempre ha sido muy dominante", señala para finalizar.
