La hegemonía de Mercedes en la Fórmula 1 ya no es la que era. El año pasado Ferrari ya les avisó al lograr hasta cinco victorias (todas de Sebastian Vettel), pero en la presente temporada los de Maranello han dado un importante golpe encima de la mesa y han revertido la situación, tanto que en 2018 suman más triunfos que los de Brackley (tres frente a los dos de Mercedes). Se podría decir que la escudería italiana cuenta este año con el coche más completo, a pesar de que los números del Campeonato de Constructores digan lo contrario, sin embargo, Lewis Hamilton no ha dudado en mostrar su plena confianza hacia el equipo y en asegurar que no permite que la preocupación se apodere de sí mismo, ya que es el primer signo de debilidad; un estado que nunca hemos visto patente en la personalidad del británico. De igual modo, señala que su principal objetivo es mantener el mayor grado de concentración posible para continuar mejorando día a día y poder batir a todos sus rivales.
"No dejo que la preocupación entre en mi cabeza. Es la primera señal de debilidad, y mi mente no es débil. Sigo estando aquí para ganar, y aún creo que podemos hacerlo. Tengo plena confianza en mis hombres, y estoy poniendo toda mi energía hacia ellos. El momento en que cualquier persona, en cualquier deporte, como por ejemplo en tenis o en golf, o como también en los negocios, cree que podría perder esto, en ese mismo momento, ya ha perdido. No me importa dónde comienzo en la parrilla, ya que no miro a ningún piloto ni pienso que podría perder ante esa persona. Soy de los que piensan en cómo puedo vencerlos y cómo puedo ser mejor, y voy a seguir haciendo eso hasta que me muera", ha comentado en unas declaraciones recogidas por ESPN.
Red Bull, un rival intermitente
De igual modo, Hamilton ha destacado la fuerte rivalidad presentada por Red Bull en varios de los Grandes Premios celebrados hasta la fecha (recordemos que el equipo austriaco ha coronado el cajón más alto del podio en dos ocasiones durante 2018) y ha señalado que la temporada es una carrera de largo recorrido, de modo que el equipo más regular será quien se lleve el triunfo final: "Tenemos frente a nosotros a los Red Bull, que de vez en cuando están inmersos en la pelea. Hasta ahora los Ferrari han sido, por decirlo de alguna manera, los más consistentes, pero todavía quedan muchas carreras por delante. Estos motores tienen que recorrer un largo camino, y sucederán cosas que, simplemente, no sabremos cuáles serán o cuándo ocurrirán", ha proseguido.
Por otro lado, el tetracampeón del mundo mantiene una actitud positiva tras su quinto puesto en Canadá, pues, tras los problemas que experimentó con el motor, era más que probable una peor posición e incluso un abandono: "Estoy muy agradecido por lo vivido el pasado domingo, aunque no fue una gran actuación por parte de nosotros y queríamos más puntos. Pero miraremos hacia atrás dentro de diez carreras y diremos que en realidad obtuvimos un quinto lugar, no fue un octavo ni un abandono, y creo que estaré agradecido por ello", finaliza.
