Williams parece evolucionar poco a poco en la presente temporada de Fórmula 1. A pesar de no lograr ningún punto en el Gran Premio de Barcelona y continuar en última posición en el Campeonato de Constructores, el equipo de Grove es cada vez más competitivo en pista y comienza a aproximarse a la zona media de la parrilla, a la cual pretende unirse con regularidad Sauber. Lance Stroll, hasta ahora el único piloto del equipo británico que ha logrado puntuar en 2018, se muestra satisfecho tras la carrera disputada sobre el asfalto de Montmeló y asegura que logró el mejor puesto al que podía optar, ya que, a día de hoy, el Top 10 sigue sin estar a su alcance (en condiciones normales).
Por su parte, Sergey Sirotkin señala el accidente de Grosjean como su "talón de aquiles" del Gran Premio, pues tras verse obligado a esquivar al piloto francés cayó hasta la última posición, lo que condicionó el resto de su carrera. Asimismo, el director técnico de Williams, Paddy Lowe, no duda en admitir que, como equipo, no han llevado a cabo un trabajo lo suficientemente bueno en su monoplaza, de modo que aboga por seguir evolucionando de cara a Mónaco, próxima cita del Campeonato.
Lance Stroll (11º - 0 puntos):
"No logramos puntos, pero fue una buena carrera. Volví a empezar bien, ganando muchas posiciones, y luego fui constante e hice todo lo que pude, pero no fue suficiente para puntuar. Después de la salida del coche de seguridad, la carrera se volvió complicada, ya que fue difícil calentar las ruedas y sufrí un poco en ese aspecto, pero en general todo fue bien. Los neumáticos medios fueron bastante fáciles de manejar, y estoy muy contento con la carrera que tuvimos. Undécimo es prácticamente lo máximo a lo que podíamos aspirar".
Sergey Sirotkin (14º - 0 puntos):
"Fue un día muy duro. Tuve un buen comienzo, pero prácticamente me quedé atrapado entre tres coches debido al accidente de Grosjean delante de mí. Tuve que ir más despacio para evitar un golpe, y al reincorporarme era el último de la parrilla. Me las arreglé para luchar un poco con Hartley y seguir su rebufo durante un par de vueltas. Además, luché mucho con la comodidad de mi asiento, un aspecto que estamos investigando".
Paddy Lowe, director técnico de Williams:
"Fue un fin de semana muy difícil desde el punto de vista del rendimiento, pero llevar dos coches a línea de meta fue un reconocimiento para el equipo. Para los mecánicos en el garaje supone la misma cantidad de trabajo a pesar de nuestro ritmo, pero estoy contento de que hayamos terminado la carrera con nuestros dos coches antes de los test de esta semana. Con Lance, perdimos por poco los puntos después de una fantástica primera vuelta que lo llevó hasta el puesto 12, una posición en la que mantuvo un ritmo constante y supo manejar bien las ruedas. Sergey tuvo una tarde más complicada, sufriendo con el resto del coche. Se vio obligado a esquivar el accidente de la primera vuelta, lo que le generó la pérdida de temperatura de sus neumáticos. Como equipo, no hemos hecho un trabajo lo suficientemente bueno con el desarrollo de este FW41, así que seguiremos trabajando duro en la base y en las pruebas de esta semana para volver a tener una posición más sólida".
