El ex piloto canadiense es conocido últimamente por su forma de hablar sin tapujos de determinadas cuestiones, pilotos o temas importantes de la Fórmula 1. En esta ocasión, el campeón del mundo de 1997 puso el punto de mira en las formas de llegar a la categoría reina del automovilismo. Puesto que parece que si el joven piloto no reúne talento y dinero, es prácticamente imposible que pueda llegar a alcanzar un volante de F1. En ocasiones, los niños sueñan con convertirse en piloto, como muchos de sus ídolos. Sin embargo, de un tiempo a esta parte se está convirtiendo en un requisito imprescindible el llevar un importante montante económico como respaldo. Por lo que Jacques afirma que los niños ya no sueñan, porque para muchos ya no está permitido, quizá puedan enfocarse en llegar a la Copa Porsche, porque otra cosa sería una utopía, para muchos se cerró la oportunidad de llegar aun teniendo talento, solo por el hecho de no tener el dinero necesario. En algunas ocasiones, durante años pasados, algunos padres se acercaban al canadiense para pedir consejo, sus hijos querían correr. Pero él se veía obligado a ser sincero, aunque sonara duro, su respuesta era que se dedicaran a otra cosa.

Las ilusiones de muchos se truncan por el dinero
"En los viejos tiempos, los padres venían a mí y me decían: 'Mi hijo quiere correr, ¿qué debería hacer?', a lo que yo respondía, 'dile que se dedique a hacer otra cosa'. Y es que, ahora, los niños ya no sueñan. Para muchos, el futuro es a lo sumo la Copa Porsche, porque no pueden llegar a ningún otro lado si hablamos de temas financieros, por lo que ni siquiera se les permitió soñar con la posibilidad de intentar llegar. En el pasado, necesitabas talento, y el dinero era una buena adición. Pero, ahora, necesitas dinero y talento. Si lo tienes, es un buen bono, pero lo cierto es que lo necesitas. Para ellos no es un mundo hermoso".
Su modelo de trabajo, sin datos, solo talento
"No es algo moderno como se acostumbra hoy en día. No, ellos están con nosotros para pilotar, y queremos que sean independientes. Trabajamos el aprendizaje autónomo, deberían poder descubrir por sí mismos lo que necesitan, y si no lo hacen, no tendrán lo necesario para llevarlo a los niveles de Fórmula 1. No trabajamos en una sala analizando datos de forma extensa. Ellos se sientan, escuchan, miran a los demás e intentan resolverlo, y nos hemos dado cuenta de que después de dos días, ya tienen todo claro. He comprendido más y realmente he progresado como piloto. Es una forma en la que los padres pueden averiguar si su hijo es capaz de hacerlo. O para los fabricantes, pueden enviar diez pilotos de kart que creen que son buenos, y los pasamos a evaluar, en lugar de pagarles enormes contratos. Ya tenemos tres con nosotros, que nunca han tenido un volante en sus manos, los primeros dos días fueron un poco difíciles, pero al final no estaban lejos. Si nuestro campeón gana en la Fórmula 4, entonces haremos cualquier cosa para ayudarlo, no podemos prometer nada porque todo está fuera de nuestro poder en este momento, así que no hay un millón para dedicarlo a ello".