Red Bull sorprendía a todos con el inesperado podio de Max Verstappen en el pasado Gran Premio de Australia, el cual levantaba grandes expectativas para los de Milton Keynes de cara a la segunda prueba de la temporada; sin embargo, el trazado de Sakhir iba a reflejar una situación muy distinta, ya que el equipo austriaco no solo se mostraba muy lejos del ritmo de Mercedes y Ferrari, sino que además veía cómo Haas y McLaren se situaban casi a la par. Fue tal el retroceso observado en Baréin que el asesor de Red Bull, Helmut Marko, quien hasta ahora se había mostrado realmente optimista con las opciones de su escudería en la actual campaña (vaticinó que lograrían varias victorias este año y que Verstappen lucharía por el título), ha admitido que en estos momentos tienen un problema aerodinámico en el RB15 que no pueden solucionar de un día para otro, por lo que parece que se avecinan tiempos complicados para los hombres de Milton Keynes. Aun así, ha añadido que viajarán a China con un nuevo paquete de actualizaciones con el que esperan dar un paso adelante que les permita alejarse de la zona media de la parrilla.
"Como es obvio, no habrá un coche nuevo esta temporada. Tenemos un problema aerodinámico. Está en el chasis, y lo cierto es que no es algo que vayamos a conseguir solucionar de una semana para otra. El primer paquete de actualizaciones llegará en China la próxima semana, mientras que en España vamos a hacer los ajustes aerodinámicos que sean necesarios para mejorar nuestro rendimiento", ha comentado en declaraciones concedidas al portal web GP Blog.
No busca culpables
Del mismo modo, Marko ha continuado con su autocrítica y ha aseverado que la falta de equilibrio del monoplaza se debe únicamente a una insuficiente gestión por parte del equipo, de modo que exculpa a Honda de cualquier problema actual, asegurando que el trabajo de los nipones hasta el día de hoy ha sido perfecto, pues la unidad de potencia no ha experimentado ningún problema en estos primeros dos Grandes Premios de la temporada: "Honda está haciendo un buen trabajo, ya que nada se rompe. No podemos decir nada malo de ellos. Somos nosotros los que no lo hacemos bien y fallamos en el equilibrio del coche. Tiene que ser mejor, pues nos falta velocidad. Debemos acercarnos de manera progresiva a Mercedes y a Ferrari y encontrar soluciones a nuestro problema. Es realmente necesario", ha señalado a modo de conclusión.
