Los integrantes de Williams anticipaban que este fin de semana sería una odisea para ellos y que sería prácticamente imposible llegar a Q2. Las largas rectas y las curvas rápidas eran el principal problema para que el FW43 fuera competitivo. Todo parecía perdido antes de que empezaran a rodar hasta que vieron que eran rápidos en los entrenamientos y eso había sido una sorpresa positiva. Aunque lo que pasa los viernes puede ser engañoso, pero no ha sido el caso en esta ocasión en la que George Russell tenía el ritmo para estar cerca de ambos Ferrari. Con lo visto ayer, hoy llegaban preparados para pelear por el mejor puesto posible en Q1, ya que no esperaban más. Sin embargo, el joven británico había conseguido escapar de la zona de eliminación en su primer intento y en el segundo también lo logró. Lo que parecía impensable, fue posible. Además, había terminado a un par de décimas del Ferrari de Sebastian Vettel en Q2, lo que era realmente alentador de cara a la carrera.
En la cara contraria de la moneda estaba Nicholas Latifi. El canadiense había tenido una sesión complicada porque tenía la confianza suficiente en el monoplaza y en el circuito para finalizar dentro de las posiciones de Q2. Sin embargo, la bandera amarilla en los últimos instantes había provocado que su vuelta final no se pudiera completar al ritmo en el que venía y todo lo ganado se quedó en nada. Debido a este inesperado percance, el segundo Williams comienza penúltimo en la parrilla de salida, una posición difícil para luchar contra los rivales de delante. Aun así, Dave Robson destaca que el equipo ha hecho todo lo posible para que sus pilotos tuvieran la mejor herramienta para la clasificación, la tuvieron, pero las circunstancias fueron diferentes según a quién miremos. De todas formas, desde la escudería británica confían en estar en la batalla contra los Haas y los Alfa Romeo durante la carrera.
George Russell (15º - 1:43.468):
"Probablemente, haya sido la mejor clasificación del año para nosotros, estoy emocionado. Sobre el papel, nuestro coche no se adaptaba a este circuito por las largas rectas, por lo que no esperábamos estar tan cerca de la Q2. Conseguimos hacer una muy buena vuelta y el coche lo notaba fantástico. Estoy encantado por haber llevado el coche al límite. Esperamos que llueva mañana para que anime las cosas un poco, cruzamos los dedos".
Nicholas Latifi (19º - 1:44.138):
"Estoy bastante frustrado porque había potencial para llegar a Q2. Habíamos tenido mala suerte por la bandera amarilla lo que afectó mi último intento. Mi vuelta, considerando este problema, había sido lo suficientemente buena. Sin embargo, el coche era fantástico y, con los cambios que hicimos por la noche, podíamos haber llegado a Q2. Está claro que lucharemos y desafiaremos a los otros coches en la carrera".
Dave Robson, jefe de rendimiento de Williams:
"Ha sido positivo estar de vuelta en Q2 otra vez en este fin de semana y esto es la prueba de todo el trabajo duro que ha estado haciendo el equipo. Las nuevas piezas que hemos traído aquí están funcionando bien. Nicholas había tenido mala suerte con la bandera amarilla que le costó tiempo en su última vuelta de Q1, pero ha sido una buena sesión y ambos pilotos han tenido vueltas limpias, lo que nunca es sencillo en este circuito. Ha sido una sorpresa estar luchando contra los dos Ferrari, pero nuestra batalla es contra los Haas y los Alfa Romeo. Mañana es cuando importa, aunque estamos en una buena posición con ambos coches para luchar contra nuestros dos rivales. Si podemos meter presión a los Ferrari, podemos conseguir una buena carrera".
