Continúa la controversia en torno a la temporada 2021 de Fórmula 1. Si bien de un tiempo a esta parte la gran protagonista ha sido la normativa, ahora la atención recae en los monoplazas, y es que los bocetos de los coches presentados a los equipos han causado un gran rechazo entre los mismos, quienes no dudan en criticar la desaparición del enfoque futurista, el hecho de que no haya prácticamente diferencia entre los bólidos y que estos presenten una imagen más propia de la IndyCar. Todas estas objeciones solo suponen un traspiés más respecto al futuro reglamento, que hace unos días quedó pospuesto hasta octubre debido a la desinformación acerca del mismo y a toda la incertidumbre creada a su alrededor: "Parece un IndyCar, pero más grande. No puedo creerme que les vaya a parecer atractivo a los jóvenes de entre 20 y 25 años. El enfoque futurista que se planeaba al principio ha desaparecido. Los coches de los juegos del ordenador son mejores que los reales", han criticado los equipos a través de un portavoz.
Acerca de estas reprobaciones ha querido hablar el director general deportivo de la Fórmula 1, Ross Brawn, que no entiende el motivo de las quejas, ya que, según él, los equipos han participado en el proceso de desarrollo del concepto de los monoplazas y, por ende, conocían toda la información al respecto, por lo que se muestra contrariado ante las críticas y se pregunta el motivo por el que no decidieron ofrecer su dictamen antes y sí lo hacen ahora: "Permitimos a las escuderías participar en el proceso de desarrollo del concepto de estos coches, así que siempre han estado informadas y conocen toda la información de cabo a rabo. Me pregunto por qué no dieron la alarma antes", ha apuntado en unas declaraciones concedidas a la publicación alemana Auto Motor und Sport.
Los datos dan la razón a la F1
Sea como fuere, las pruebas completadas en el túnel de viento de Alfa Romeo han ofrecido resultados muy positivos, según han confirmado desde el Grupo de Trabajo encargado del diseño de estos coches y liderado Pat Symonds, ya que se ha alcanzado el objetivo previsto en cuanto al rendimiento, logrando que el coche perseguidor de la campaña 2021 pierda menos del 10% de carga aerodinámica frente al 50% que pierde a día de hoy, por lo que el fin principal se ha conseguido, independientemente de que el diseño de los bólidos no haya contado con la aprobación de las escuderías.