Parece que los astros no se han alineado con Ferrari en este comienzo de campaña. Antes de la carrera en Baréin, el equipo italiano decidió sustituir la centralita eléctrica del monoplaza de Charles Leclerc por precaución, sin embargo, el número '16' se vio obligado a abandonar posteriormente la prueba por un fallo en la centralita electrónica, en concreto la encargada de gestionar la batería. Un contratiempo realmente importante para el monegasco, que perdía 25 puntos respecto a Max Verstappen, quien ya de por sí parece contar con un coche superior, complicándole con ello las cosas desde el principio.
Penalización para él
Pero los problemas para Charles no acaban ahí, y es que la escudería del Cavallino Rampante ha informado a SoyMotor de que su pupilo se verá obligado a perder diez posiciones en la parrilla de salida del Gran Premio de Arabia Saudí al tener que estrenar una tercera electrónica de control. De este modo, el de Montecarlo arrancará más allá del Top 10 en carrera y deberá remar a contracorriente si pretende pelear, al menos, por el podio. Muy bien tendrá que hacerlo si no quiere perder otro buen puñado de puntos con los hombres de Red Bull. Sin duda, un comienzo aciago para él. De momento, el piloto de Ferrari ha sido el primer sancionado de la campaña. Veremos cómo solventan los de rojo este complejo arranque de año.
