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Ross Brawn: "Charles fue demasiado lejos y pagó un alto precio por su impetuosidad"
REALIDAD AMARGA

Ross Brawn: "Charles fue demasiado lejos y pagó un alto precio por su impetuosidad"

Ross Brawn: "Charles fue demasiado lejos y pagó un alto precio por su impetuosidad"

Sandra Molina   28 de Mayo 2019 21:39

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El joven piloto de Ferrari encaraba el pasado fin con la emoción y la ilusión de vivir su primera vez en Mónaco como piloto de la mítica escudería de Ferrari. Pilotar en Mónaco siempre es especial para cualquier piloto, pero para Charles era su debut en casa vestido de rojo, un sueño que se forjó durante su infancia, viendo las carreras de Fórmula 1 desde casa de un amigo en la misma Santa Devota. Sin embargo, nada salió como se esperaba, todo se fue complicando y la clasificación condenó a Leclerc a tomar la salida desde el fondo de la parrilla. Nada acompaña en Ferrari, ni el potencial de su monoplaza, ni las decisiones, esta vez un error de cálculo. Fuera como fuera, cuando los semáforos se apagaron, Charles Leclerc se quedó solo ante el desafío.

La salida y las primeras vueltas fueron brillantes por su parte, pero puede que se precipitara en algunos adelantamientos. Muestra de ello fue que algunos de sus rivales así lo afirmaban tras la prueba. Todo acabó en el noveno giro de la carrera, cuando Leclerc trató de adelantar al Renault de Nico Hülkenberg en La Rascasse, el neumático del SF90 del monegasco quedó dañado en el intento, durante la siguiente vuelta se destrozó por completo y la banda de rodadura, giro tras giro, acabó provocando importantes daños en el fondo plano del monoplaza. Por lo que no le quedó más remedio que poner rumbo al garaje para cambiar sus gomas. Después salió a pista, pero pudieron comprobar que el coche no estaba en condiciones de hacer frente a todas las vueltas que quedaban. Por lo que Lecler tuvo que aparcar su coche en el box y poner fin antes de tiempo a un fin de semana amargo, que en un principio esperaba dulce.

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Ross Brawn ha comentado lo sucedido durante el Gran Premio de Mónaco, comprende la reacción de el joven piloto de Ferrari, pero considera que los de Maranello se están alejando de las posibilidades que tenían para reafirmarse como verdaderos candidatos al título mundial. Charles Leclerc acabó pagando un precio muy elevado, mientras que Sebastian Vettel se hacía con el mejor resultado del equipo en lo que va de año. Un falso caramelo que no endulza el amargo momento por el que Ferrari está pasando. Pero Brawn considera que Ferrari es Ferrari y no es momento de rendirse, lo que deben hacer es aprender de los errores garrafales que han cometido si quieren avanzar y no tirar por tierra el sueño de volver a ser campeones. Y es que el año comenzaba muy positivo para el equipo, con el noventa aniversario, las buenas sensaciones tras la pasada temporada y las expectativas generadas durante el invierno en los test de pretemporada. Pero la realidad, en ocasiones, es dura y te golpea con fuerza, con un duro revés, cuando más pensabas que todo iba de cara.

Decepción en un día que estaba llamado a ser especial

"Durante unas cuantas vueltas, Leclerc estuvo realmente espectacular. Pero, después, Charles fue muy lejos y pagó un precio demasiado alto por su impetuosidad. Su reacción fue comprensible, sin embargo. Esta era su carrera en casa y su primera vez con un equipo del frente de la parrilla. Se suponía que era un momento especial, pero terminó únicamente en decepción. Después de algunos problemas el jueves, la sesión de entrenamientos final del sábado por la mañana ofreció un rayo de luz cuando logró remontar en la hoja de tiempos. Pero luego se dio la bofetada con el error estratégico de la Q1. Lo cierto es que hasta Mattia Binotto lo admitió por completo, que fue un error de cálculo del equipo, y cayó hasta la decimosexta posición, una posición inicial que lo llevó a tener que remontar el domingo".

"Fue un fin de semana difícil para Ferrari, aunque terminó con su mejor resultado del año. Sin embargo, el segundo lugar de Vettel llegó al final de una carrera en la que no jugó un papel clave, pilotando detrás de Verstappen en todo momento, pero sin poder preocupar realmente al holandés. Reflejó un fin de semana durante el cual la Scuderia fue el tercer equipo más fuerte. Eso era algo que podíamos predecir, dado lo que vimos en Barcelona, donde el coche tuvo problemas. Especialmente en el tercer sector de esa pista. La temporada parece estar alejándose del equipo de Maranello, pero no es el momento de rendirse y deben aprender de sus errores si quiere avanzar".

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