El español, que al igual que Michael Schumacher regresó a la competición tras tres años apartado de las carreras, cree que ese período de inactividad no ha supuesto una pérdida de sus instintos de pilotaje:
"Después de Silverstone fue muy difícil para mí aceptar lo que pasó allí, porque éramos muy competitivos. Pero en Hungría volvimos a la Q3 y conseguimos puntos para el equipo. Creo que estoy pilotando mejor en cada carrera, para ser honesto. No sé cómo se sentirán otros pilotos, pero yo me estoy acercando a un muy buen nivel ahora mismo", asegura el catalán.
"Todos los cambios que hemos introducido desde Valencia tenían como objetivo las curvas lentas, y por eso era interesante ver el rendimiento que tendríamos en Hungría", comentó Pedro, convencido de que el equipo ha encontrado el camino en lo que a evolucionar el coche se refiere, tras el mal inicio de temporada.
"Siempre nos daría una indicación de si los cambios iban en la buena dirección o no. Al carecer de tests es más difícil, pero definitivamente hemos hecho los cambios correctos en el coche, y podemos decir que no sólo somos competitivos en circuitos de alta velocidad como Silverstone.""Las curvas de alta velocidad nunca han sido un problema para nosotros. El mayor contratiempo era siempre la baja velocidad, y Hungría es muy lento, como Mónaco", añadió De la Rosa.
El español elogió al nuevo director técnico del equipo Sauber, James Key, considerando su llegada como una de las claves que ayudaron al equipo con base en Hinwil a mejorar su rendimiento:
"James Key ha significado una gran diferencia para el equipo, y ha hecho una gran contribución para dar un paso adelante. Le estoy muy agradecido", concluyó.
