
"¿Quien mejor para suministrar motores a un equipo italiano que Ferrari?" señaló Mateschitz en declaraciones a La Gazzetta dello Sport.
Tras debutar en Formula 1 con un motor Cosworth en 2006, Toro Rosso pasó a montar propulsores Ferrari en 2007, factor que resultó clave en el buen rendimiento de la escudería en la pasada campaña. Ésta será la tercera temporada consecutiva en la que Toro Rosso dispondrá de dicho motor.