Sin embargo no hubo fortuna, y las condiciones climatológicas han frustrado los planes de trabajo de los equipo, y muy seriamente el que se refiere al comportamiento de los nuevos neumáticos slicks, que tan pocos kilómetros han completado en esta semana.
Uno de los Directores Técnicos de Bridgestone, desplazado a Portugal, Tetsuro Kobayashi, explicaba desalentado: "La lluvia, e incluso el granizo, han obstaculizado el progreso durante la semana".
"Además se trata de una pista muy nueva, con aceite proveniente del alquitrán, que hacía que la superficie estuviese muy resbaladiza incluso en condiciones de seco"; añadía el japonés. "Por supuesto, cualquier día de test perdido significa que los equipos no han podido probar sus nuevos coches y continuar aprendiendo sobre los neumáticos lisos, sin embargo hay algunos test más antes de visitar Albert Park en Australia para la primera carrera de la temporada".
Este año la cosa se complica, dada la reducción de los test para el 2009, por lo que el trabajo no realizado durante esta semana queda aplazado a próximas sesiones. Aunque no ocultaba su frustración, Tetsuro Kobayashi era optimista en este aspecto: "Desde Bridgestone confiamos en que habrá suficientes test para los equipos antes del inicio de la temporada, que posibilitarán carreras buenas y seguras".A pesar de la infructífera semana en Portimao, el japonés se confiesa impresionado por el circuito luso: "La pista de Portimao es ciertamente una instalación impresionante y un reto para aprender, tanto equipos como pilotos. La superficie de la pista esta muy lisa, como es de esperar en nuevo circuito. En este test, la lluvia no nos ha ayudado con el nivel de agarre, así que en términos de obtención de datos para que podamos estudiar, estamos en una situación de desventaja".
Imaginamos que los técnicos nipones desplazados a Cheste con BMW habrán, conseguido recabar mayor información y sacar conclusiones para seguir con la evolución de las "gomas".