Pic, que completó 37 carreras de Fórmula 1 en las temporadas 2012 y 2013, firmó un acuerdo como reserva con Lotus en la pasada temporada y, a su juicio, no recibió los días al volante que figuraban en ese contrato. Esa fue la razón por la que el piloto francés realizó una denuncia contra el equipo, provocando que los coches fueran retenidos en las instalaciones de la sede del Gran Premio de Bélgica.
El piloto, que disputó cinco carreras en la temporada inaugural de la Fórmula E, solicitaba una compensación económica por dicho incumplimiento de contrato. La falta de acuerdo en las negociaciones entre ambas partes hizo que el material del equipo haya sido retenido hasta que su liberación en la jornada del miércoles posterior al Gran Premio, por lo que se espera que Lotus no tenga problemas para estar en Monza para formar parte del Gran Premio de Italia.
"Estar en las carreras nos lleva un grandísimo esfuerzo"
A pesar de que el equipo constantemente se ha encargado de desmentir sus problemas financieros, este episodio parece haber hecho que el equipo reconozca las grandes dificultades que están atravesando. "Estamos teniendo una temporada muy, muy difícil," admite Alan Permane, jefe de operaciones.
"Es la peor temporada que hemos tenido en el ámbito financiero y hemos tenido que recuperar piezas para poder tener los coches en pista. Es un esfuerzo grandísimo cada semana," reconoce Permane, que no oculta su ilusión porque el equipo vuelva a caer en manos de Renault por la estabilidad que la entrada de un fabricante podría aportarle.
"El equipo está deseándolo. Los recibiríamos con las manos abiertas. Tenemos una gran relación con Mercedes, pero ser un equipo de fábrica de nuevo sería fantástico. A partir de ahí podríamos trabajar en lo que tenemos ahora, construir sobre el chasis de este año y tratar de repetir lo que hicimos con Renault en 2005 y 2006," comenta el jefe de operaciones de la escudería de Enstone.
Nerviosismo en Red Bull
Según publica Sky Sports, el retraso en la confirmación del acuerdo entre Renault y Lotus podría afectar al futuro de la escudería Red Bull, a caballo entre la opción de continuar con su actual motorista o adquirir motores Mercedes para 2016. Al parecer Christian Horner se encuentra molesto ya que el retraso en la confirmación de la vuelta de Renault como constructor afectaría seriamente a los plazos previstos por el equipo para el año que viene.
Horner se ha encargado de recalcar recientemente que su contrato como equipo de fábrica de Renault se extiende a la próxima temporada aunque sus intenciones reales pasan por romper con la casa francesa para montar motores Mercedes. Así pues, parece que la separación entre ambas partes está solo pendiente de ver cómo se resuelve ese contrato en lo económico y el orden en que se produzcan las confirmaciones de las dos noticias relacionadas con Renault podría ser clave para determinar quién saldrá beneficiado de la rescisión del contrato entre ambas partes.
