
El 'Shanghai International Circuit' es un circuito complicado para los neumáticos, los monoplazas pasan alrededor del 80% de la vuelta trazando curvas, lo que significa que los neumáticos están puestos bajo presión en casi todo momento. A fin de alargar la vida de los neumáticos, es importante que los pilotos tengan cuidado de no derrapar demasiado a la salida de las curvas. Pirelli espera que en circunstancias normales de carrera los equipos apuesten por una estrategia a dos paradas.
Paul Hembery, director deportivo de Pirelli:
"El clima tiende a ser bastante impredecible en China, aunque en general podemos esperar ver temperaturas significativamente más frías que las que hemos tenido en Malasia. El año pasado tuvimos condiciones meteorológicas razonablemente estables en China, mientras que en años anteriores ha sido más impredecible, por lo que esto añade una variable muy interesante. El neumático delantero izquierdo es el que más sufre en Shanghai, mientras que las exigencias de tracción del circuito también dan mucho trabajo a los neumáticos traseros. Aunque no hemos visto todavía un Gran Premio de China muy caluroso durante nuestro tiempo en la Fórmula 1, si nos fijamos en el historial del tiempo existe la posibilidad de que esto suceda también. Esto haría las cosas muy difíciles para los neumáticos - Shanghai es un circuito abierto grande y si se agrega el calor, se crea una gran cantidad de energía - pero hemos visto en Malasia que estos neumáticos están a la altura del desafío. Como Shanghai es un circuito largo, hay un montón de oportunidades para que se den adelantamientos y grandes batallas en la pista. Por nuestro conocimientos en términos de estrategia, normalmente esperaríamos una carrera a dos paradas".