Sin embargo, Sato, que compitió en la F1 entre 2002 y 2008 para los equipos Jordan, BAR y Super Aguri y que ganó la carrera de IndyCar en Long Beach en 2013, duda que los coches de F1 puedan lidiar con el asfalto bacheado del circuito. "No sé si los actuales coches de F1 podrían absorber las condiciones del asfalto aquí, dudo mucho que pudieran. Tendrían que reasfaltarlo como hacen en Monte Carlo cada año. Y el resto de la pista es semi permanente, por lo que cuentan con un asfalto muy suave", señaló Sato en Autosport.
Quejas por los baches
Este escepticismo de Sato lo comparte también el veterano expiloto de F1 Justin Wilson: "Nos encanta ir allí porque es Long Beach, hay mucha diversión y es todo puro. Pero un coche de F1 no irá allí. Se han estado quejando de los baches: han tenido que reasfaltar todo el lugar después de haberlo construido todo. Vi esa historia [el regreso de la F1] y solté una carcajada. No hay forma de que una carrera de F1 pueda celebrarse aquí. En los 80, se podía hacer, pero ahora no tiene sentido. Es un gran evento, nos encanta, pero Mónaco es igual de suave que la Indy 500, para dar na referencia".