
"Trabajar sin calentadores de neumáticos es un gran problema. No es ningún problema con los compuestos, sino que tiene más que ver con no dejar que el neumático se convierta en un globo, lo que lo haría inmanejable o peligroso. Ese es el mayor problema que estamos analizando. De momento, tengo que decir que parece muy complicado conseguir mantener el actual tamaño de los neumáticos para la siguiente temporada", señaló Hembery en Autosport.
Con el tiempo puede suceder
Los anteriores intentos de prohibir los calentadores en la F1 se descartaron por razones de seguridad, debido a las dificultades de asegurar el límite de presión mínimo. Hembery ha apuntado que si el tamaño del neumático de F1 fuera diferente se podría prohibir los calentadores, pero un cambio de tal magnitud no es posible en 2015: "Con el tiempo, todo es posible. El número de parámetros involucrados son tan importantes e intrínsecos a la seguridad inherente del deporte que no es algo que se pueda hacer a la ligera".
"Aunque la situación mejore en relación a los entrenamientos, se puede debatir sobre si es aceptable o suficiente permitirnos encontrar una solución que sea lo suficientemente buena para la F1. Hay otros deportes en los que no se usan calentadores, como en la GP2 por ejemplo. Pero hay otra cantidad de deportes en los que las dimensiones de las ruedas son diferentes, las presiones iniciales son mucho más elevadas. Es algo que ha evolucionado con el tiempo, no es algo que haya pasado de forma instantánea. Se ha de hacer con precaución, de lo contrario crees estar dando un paso adelante positivo, pero puede volverse negativo", añadió Hembery.