La fiabilidad y la gestión del combustible serán clave este año. Los complejos V6 Turbo de 1.6 litros que estrena la F1 son todavía muy jóvenes y todavía hacen falta realizar muchos kilómetros para que los equipos los dominen como los V8 de la temporada anterior. Además, por primera vez los monoplazas de la máxima categoría del automovilismos tendrán una cantidad limitada de combustible para completar cada Gran Premio, en concreto 100 kg combustible que como varios pilotos coinciden parecen demasiado escasos para algunos circuitos.
"En mi carrera (deportiva) no había visto una pretemporada con tantas banderas rojas y coches averiados. Eso te indica las dificultades a las que nos enfrentamos todos a principio de temporada. Es un año muy complicado y no solo para explicar lo que está sucediendo sino también para los ingenieros por la cantidad de parámetros y variables que hay que cambiar durante la carrera", comentó De la Rosa en declaraciones recogidas por la web oficial de Antena 3.
Nuevas 'preocupaciones' para el piloto
El F14T es el único monoplaza no motorizado por Mercedes que ha conseguido liderar una sesión de entrenamientos de pretemporada. No obstante, Pedro de la Rosa es consciente de que la competencia va a ser muy dura esta temporada: "Para mí es un desahogo y necesidad pasar las semanas preparando cada gran premio en el simulador en Maranello. Hemos hecho los deberes en Maranello, pero aún así va a ser muy complicado".
"No van a ser carreras de sprint y sí carreras donde la inteligencia del piloto va a ser la clave. Ahora lo importante es el motor, la gasolina y la energía disponible por vuelta", finalizó De la Rosa.
Marc Gené coincidió con su compañero de equipo al destacar la gasolina como uno de los factores clave: "Se va a hablar mucho de consumo y durante la carrera de fiabilidad. Antes de la carrera se verá cómo gestionar los 100 kilos de gasolina que, yendo a fondo, no son suficientes".
