Williams fue, de hecho, el equipo que mayor número de vueltas completó en Baréin durante las cuatro jornadas de la primera semana de entrenamientos en el circuito de Sakhir, con un total de 323, lo cual también sirvió para reafirmar al motor Mercedes como el más fiable de los tres suministradores de la categoría.
"Algo de lo que estamos muy orgullosos en Williams es de ser el único equipo que no ha causado ninguna bandera roja durante los test de pretemporada", explicó Symonds en declaraciones a Sky Sports F1. "No nos hemos detenido en la pista en ninguna ocasión, y eso es un testimonio del diseño, la fabricación y la calidad que se ha puesto en nuestro coche."
"Perdimos un día entero al principio debido al problema de cableado que formaba parte de la electrónica del sistema de combustible, pero después de eso el coche se ha comportado de ensueño."
Después de una temporada para el olvido, en la que sólo consiguieron puntuar en dos carreras para terminar novenos en el campeonato de constructores, el cambio de Renault a Mercedes parece haber empezado a dar sus frutos, lo cual no hace sino incrementar el optimismo del equipo británico de cara a lo que se prevé como una temporada altamente complicada.
"Con la complejidad de los motores de 2014, todos hemos tenido que aprender un poco más. Hemos tenido que reprogramar la parte diagnóstica de nuestros cerebros para entender estos sistemas", explica Symonds, quien llegó a la escudería inglesa procedente de Marussia el pasado mes de julio.
Contentos con la combinación entre el FW36 y el motor Mercedes
"Estamos muy satisfechos con lo que tenemos, es una unidad compleja, una obra de arte para un ingeniero. Ha funcionado de forma muy fiable para nosotros. Tiene mucha potencia, un gran torque. Es un verdadero homenaje a ellos."
"Creo que estamos ante los cambios más grandes entre temporadas. Hay quien ha tenido problemas, pero hay quien no. Creo que la Fórmula 1 necesita estar a la cabeza en cuanto a tecnología, no debería ser fácil, somos constructores y eso es lo que diferencia a la Fórmula 1 y parte del ADN de la Fórmula 1 es la existencia de liderazgo técnico y el estar al límite de lo tecnológico."
Ante unos cambios tan importantes, cabe la posibilidad de que el orden de la parrilla que durante los últimos años ha permanecido ligeramente estable pueda dar un vuelco. Symonds no esconde que les encantaría volver a luchar por las victorias, pero sabe que para ello deberán trabajar muy duro, pues el entorno de la F1 es tremendamente competitivo: "Ojalá podamos luchar por las victorias, pero es algo muy difícil de llevar a cabo."
"El ritmo evolutivo es incansable, la competitividad es intensa... Estamos dando todo cuanto podemos, pero no esperamos milagros de la noche a la mañana. Las cosas pintan bien, sí, estamos en buena forma, pero sigamos trabajando y los resultados llegarán."
