
"La idea fácil es decir que no puede haber evoluciones durante una congelación de motores! Sin embargo, todavía ha habido varios cambios notables en el uso y los requisitos para los motores en la era V8. De hecho, casi todos los años ha habido un cambio. La primera en 2007, fue una homologación o congelación de las partes principales y la introducción de un límite de revoluciones. Luego, para 2008, el perímetro de homologación se amplió y la SECU se introdujo. En 2009, se introdujo el límite de ocho motores por piloto por temporada y el límite de revoluciones se redujo de 19.000 rpm a 18.000 rpm. Más recientemente, también hemos tenido sucesivas aclaraciones sobre la cartografía del motor y su uso. Con la F1 siendo lo que es, el reto ha sido producir el mejor rendimiento del coche en cada nuevo conjunto de restricciones. Al mismo tiempo, hemos tenido que adaptarnos a un ciclo de vida mucho más complicado del motor, con una mayor duración de los motores", explicó White en declaraciones en exclusiva al portal GPUpdate.
En términos de motores, la F1 se ha vuelto mucho más eficiente en los últimos años, alargando la vida útil de los motores más de 2000 km, un gran logro que ha querido destacar White: "En otros tiempos era posible ajustar motores a voluntad: podías ajustar un nuevo motor para una carrera y luego sustituirlo para el próximo GP. Esto significaba que se podía empujar (el motor) a los límites absolutos, sin tener en cuenta cualquier uso futuro. El límite de ocho motores por temporada significa que algunos motores se debían utilizar en tres carreras. Por ello, hemos aprendido mucho sobre el aumento de la duración del motor y de los componentes, sin ningún cambio de tecnología importante o pérdida de rendimiento. Como resultado ahora los motores pueden funcionar durante más de 2.500 kilómetros sin ninguna caída de rendimiento significativa. En el pasado, la vida del motor era de poco más de 350 kilómetros, por lo que los motores están funcionando a más de siete veces la distancia de hace doce años".
Los V8 podrían haber sido más potentes
Por último, White trató de predecir cuánto podrían haber dado de sí los V8 sin la congelación de motores y el límite de revoluciones: "Sin el límite de revoluciones habríamos seguido aplicando mayores rpm hasta que llegáramos a ser limitados por la física del proceso de combustión y los rendimientos decrecientes debido al aumento de la fricción con el aumento de la velocidad de rotación. Sin ninguna otra nueva restricción en las reglas, me imagino que hubiéramos llegado a más de 22.000 rpm en estos momentos y hubiéramos encontrado unos 75 caballos de potencia adicionales (es decir, un 10%), lo que equivale a una ganancia de tiempo de vuelta de unos 2 segundos en el circuito de Monza".
Sin embargo, White admite que es complicado afirmar algo rotundamente cuando se trata de una situación que nunca tuvieron: "Sin hacer el trabajo de desarrollo, es difícil juzgar el nivel en el que el rendimiento del motor habría convergido en el límite de los reglamentos técnicos. Los mismos efectos que han sido perseguidos en la era congelado (tubos de escape, la cartografía, etc) habría sido de interés, pero las prioridades podrían haber sido diferentes".