
Pirelli, suministrador único de neumáticos de la F1, no ha podido dar un pronóstico muy exacto sobre cuantas paradas veremos en carrera si la prueba se desarrolla finalmente en condiciones de seco. Si esto sucede, todos los equipos y pilotos tendrán neumáticos frescos de sobra, ya que hasta el momento la lluvia no les ha dado un respiro en el circuito de Interlagos.
Paul Hembery (Responsable de Pirelli Motorsport):
"Una sesión de clasificación en mojado hizo que los pilotos y equipos tuvieran que hacer frente a muchas incertidumbres, pero al menos tenían información relevante de las vueltas que dieron ayer en mojado. Las claves para una buena actuación eran asegurar que los neumáticos trabajaran dentro de la ventana correcta de temperatura, y dar la vuelta en el momento oportuno. Calzar el neumático adecuado en el momento oportuno era esencial para hacerlo bien, y como este circuito tiene la capacidad de secarse muy deprisa, lo más probable era que la pista se volviera más rápida hacia el final de cada sesión. Asimismo, los equipos tenían que eludir constantemente el riesgo de que las condiciones empeoraran. Los equipos han recopilado información sobre el punto de intercambio de los neumáticos de lluvia a los intermedios, pero no tienen información alguna acerca del punto de intercambios de los intermedios a los slicks, que podría ser importante mañana, cuando de nuevo es probable que las condiciones sean variables. Aunque no llueva, con tan poco rodaje en seco hasta ahora, los equipos trabajarán con datos limitados. El desgaste y la degradación, tanto para los neumáticos intermedios como para los de lluvia, no serán ningún problema mañana si tuvieran que utilizarse para la carrera. Evidentemente, la estrategia dependerá del tiempo, y de momento está muy abierta: los equipos que sean capaces de interpretar las circunstancias cambiantes de la carrera con más eficacia serán los que salgan vencedores".