
Como consecuencia de esa amenaza, una serie de equipos han apuntado que estarían dispuestos a dar un paso adelante, pero le correpondería a Pirelli obtener la aprobación necesaria de la FIA o costear el test. "Si no nos cuesta ni un céntimo, entonces sí. Podríamos apoyar esto", señaló Eric Boullier, jefe de Lotus, en Autosport. Por su parte, el director ejecutivo de Mercedes, Toto Wolff, añadió: "Hemos de apoyar al suministrador de neumáticos de la mejor forma posible y se trata de extraer rendimiento y ser un apoyo. Hemos de apoyarles y tratar de darles kilómetros. Es un problema de seguridad y solamente a través de la seguridad pueden decidir qué tipo de compuestos necesitan para el año que viene. Así que estamos preparados para apoyarles si se necesita algún test antes del comienzo de la temporada".
Apoyo unánime de los equipos
Pero la situación de los test es más complicada de lo que parece debido al hecho de que el cambio en las regulaciones del año que viene, votadas a través del nuevo Grupo de Estrategia, implicará que los coches de 2011 estarán prohibidos para emplearse en entrenamientos con neumáticos contemporáneos. Para cualquier tipo de entrenamiento que se realice antes del 1 de enero se necesitaría, pues, apoyo unánime de los equipos, algo que ha sido complicado de conseguir en épocas pasadas.
"Uno de los problemas que existe es que podemos probar con un coche de 2011 hasta alcanzar los 1.000 kilómetros este año, y cualquier equipo puede hacerlo. Pero a partir del 1 de enero entran en juego las nuevas regulaciones deportivas, que han dividido los coches actuales, los coches anteriores y los coches históricos en tres categorías. Los coches actuales serán los de 2013, 2014 y 2015, y los coches anteriores serán los empleados los cuatro años antes. Y nada anterior a 2009, como el coche de Hunt o el de Senna, se etiquetará como histórico. Por lo tanto, no podemos tener un coche de 2011 en los test de neumáticos una vez que lleguemos a enero", comentó Sam Michael, director deportivo de McLaren.