
Este es el temor particular que hay, porque el enorme cambio del año que viene exige que los nuevos motores turbo V6 sean un reto para los neumáticos, sobre todo en condiciones de mojado. El director de Pirelli Motorsport, Paul Hembery, ha comentado que ignorar estas peticiones de más entrenamientos antes de 2014 no es una opción para los jefes de la F1. "Sin duda, hemos de hacer cierto trabajo, y mucho más sobre los compuestos. Queremos cambiar un poco la filosofía. Este año, las elecciones fueron agresivas, quizás demasiado agresivas en algunos momentos, y hemos de mejorar la fortaleza mecánica de los compuestos para que se suelte menos goma y se suelten menos el año que viene", señaló Hembery en Autosport.
Dispuestos a trabajar en equipo
"Estamos tratando de aclarar, con la forma en la que este deporte está estructurado, la mejor forma de asegurarnos de que hacemos el mejor aporte. Y eso necesita entrenamientos, y también realizar correcciones después de dichos tests. No queremos permanecer entre intereses individuales. Queremos que el deporte nos lo pida. Si el nuevo Grupo de Estrategia va a funcionar, queremos que nos digan lo que quieren, y lo haremos. Y, si hay que hacer cambios, se deben aprobar por un organismo como ese, que tiene una mezcla de pilotos, FIA y FOM. Esa será la situación ideal; de otra forma, caes en política y ya te metes en intereses de los equipos", añadió Hembery.