Tom Kristensen, ocho veces campeón de las 24 horas de Le Mans, es uno de los pilotos que suele ocupar este cargo de forma regular en las carreras de F1. "Es un trabajo que otorga muchas responsabilidades, ya que no queremos equivocarnos. Por eso, tengo que tenerlo todo claro y contar con lo necesario en el momento para tomar la decisión correcta. Hay, pues, una gran presión en este trabajo. A veces, tengo la impresión de que estoy allí para ser el abogado de los pilotos, pero disponemos de un montón de datos para analizar un incidente. Algunos llegan a través de imágenes; otros, de la telemetría; y otros, de las conversaciones por radio", asegura el piloto de Le Mans.
Por otro lado, Allan McNish, expiloto de F1, es perfectamente consciente de las responsabilidades que se les otorga a los pilotos comisarios durante los fines de semana de los Grandes Premios: "Las decisiones que se toman pueden, de hecho, poner completamente patas arriba el fin de semana o la propia temporada si se corre a finales de año, como pasó con Tom Kristensen en Brasil. Por ello, hay que actuar con mucha profesionalidad".
Existe un sistema interno entre comisarios
Por su parte, Charlie Whiting, delegado de seguridad de la FIA y director de carrera, es consciente de la importancia del trabajo que realizan estos pilotos: "Algunos, como Tom Kristensen, son capaces de ver un incidente y decirnos inmediatamente que comprende lo que el piloto ha querido hacer. Esta rapidez en el análisis es muy útil para los demás comisarios que se encuentran en la misma sala. La contribución de pilotos tales como Allan McNish, Mika Salo o Nigel Mansell es fantástica. A ojos de los pilotos, aportan también más credibilidad a nuestras decisiones".
Desde que la FIA decidió implicar a pilotos en el panel de comisarios, el objetivo ha sido que hubiera gran constancia de las decisiones, pero no siempre ocurre eso. "Siempre hay formas de mejorar las cosas. No creo que nuestro sistema sea perfecto, ya que siempre hay un factor humano que se tiene en cuenta. Sin embargo, tratamos de mejorar nuestro trabajo. Por ejemplo, hemos llevado a cabo un sistema de comunicación interna entre todos los diferentes comisarios que están presentes en las diversas carreras, con el objetivo de comunicarles a todos no solo las decisiones, sino también las razones que nos han llevado a tomar dichas decisiones. Es algo muy útil y siempre aparecen buenas ideas", señala Connelly.