Con esta prueba privada, Kimi espera poder recuperar sensaciones y volver a sentirse piloto del "gran circo", ya que desde el GP de Abu Dabi de 2009 no ha vuelto a meterse en un 'cockpit' tan estrecho. El R30 no podrá montar los neumáticos Pirelli introducidos en la F1 en 2011 y usará en su lugar unos de demostración, pero aún así esto servirá al piloto para entrar en la dinámica de trabajo del equipo antes de los test oficiales.
El reto serán los nuevos Pirelli
Räikkönen ya dijo la semana pasada en Enstone, donde estuvo ajustando su nuevo asiento, que debería ser capaz de rodar en el mes de enero con un monoplaza: "No probaremos el coche hasta febrero, así que es una larga espera. Sin embargo, deberíamos ser capaces de utilizar un monoplaza de F1 de hace dos años en enero".
El reto serán las nuevas gomas, que no probará hasta Jerez: "Adaptarse a los Pirelli será el trabajado más importante porque tienen un comportamiento distinto a lo que he experimentado antes. Pero no estoy preocupado. No creo que haya perdido nada de velocidad".
