Así pues y como no era de extrañar, el presidente de la Scuderia, Luca di Montezemolo, se ha congratulado de la rectificación realizada por la FIA en torno a este asunto, apostando finalmente por los motores turbo V6 y limitados a 15.000 rpm, además retrasando la introducción de los mismos hasta 2014.
"La elección de tener un motor turbo V6 desde 2014 es la correcta y estoy satisfecho de observar que el sentido común ha prevalecido", afirmó Montezemolo en declaraciones recogidas por Reuters. "La decisión [de ir a por los] V6 turbo es importante porque los turbos de seis [cilindros] es bueno para el futuro, no sólo para Ferrari, sino también para Mercedes y otros".
Y ese beneficio común es lo que ha movido a los equipos ha consensuar esta propuesta de consenso tras la decisión aprobada en primera instancia por el Consejo Mundial de Automovilismo de la FIA: "Esto demuestra que estamos trabajando juntos, sin contraofertas inútiles o imposiciones, si conduce al mejor resultado para el bien de este deporte".
Su próximo objetivo: "La aerodinámica tiene que ser menos relevante"
Sin embargo, lejos de conformarse, Luca di Montezemolo ya tiene en mente su próximo objetivo, que no es otro que el de reducir el peso de la aerodinámica en la Fórmula 1. Para el máximo dirigente de Ferrari, la mecánica debería marcar las diferencias entre monoplazas.
"Hoy en día, la aerodinámica supone el 90 por ciento del rendimiento. Sin embargo creo que esto no es bueno porque no estamos construyendo satélites o aviones; estamos construyendo coches. La aerodinámica tiene que ser menos relevante en el rendimiento del coche".
Y para reafirmar su mensaje, volvió a coquetear con la salida de Ferrari de la categoría si las condiciones no satisfacen sus expectativas: "Me dedicaré a la Fórmula 1 siempre y cuando la Fórmula 1 represente para nosotros el centro de investigación más importante".
