"No hemos oído nada sobre dicha propuesta" declaró Vincent Ignizio, concejal de Staten Island. El jefe de personal, Joe Borelli, añadió:
"Nuestra infraestructura de transportes es insuficiente. Tenemos puntos de embotellamientos. Hay cuatro vías para salir y entrar de Staten Island, y nuestros puentes no son tan grandes."
Hace siete años, la NASCAR adquirió terreno en Staten Island con la intención de utilizarlo en alguna de sus carreras, pero ahora están intentando venderlo. Al parecer, una de las razones por las que la isla se niega a tomar parte de cualquier competición automovilística es que, al ser uno de los cinco municipios que configuran Nueva York, no se verían beneficiados por el dinero que generarían dichos eventos. Borelli añadió:
"Nos opusimos a la NASCAR ya que la mayoría del pueblo estaba en contra. Si fuésemos una ciudad, podría ser diferente."Otro concejal de la isla, James Oddo, apuntó:
"Con el clima económico actual, tan solo puedo imaginarme a los promotores de carreras automovilísticas teniendo problemas."