Tres han sido las principales reformas: la zona de asistencia médica, los pianos y las escapatorias. El centro médico ha sido ampliado en 205 m², para hacer un total de 435 m² destinados al paso interior de las ambulancias, zona clínica, espacio de curas y unidad de control antidopaje.
La zona de aparcamiento de las ambulancias y la de despegue/aterrizaje del helicóptero médico también han sido mejoradas para hacer posible una mayor rapidez a la hora de trasladar a los heridos.
Según el nuevo director del Circuit, Salvador Servià, el nuevo centro: "Cumple con la ultimísima normativa de seguridad exigida por la FIA, los comisarios y los servicios médicos. Además se ha creado la zona de acceso de ambulancias y una unidad de quemados".
En cuanto a las reformas de la pista en sí, decir que se han reforzado las protecciones de las escapatorias con 4.000 neumáticos extras y se ha sustituido el 60% del 'astroturf' (césped artificial) del circuito.
Por si fuese poco, los responsables del trazado se han puesto de acuerdo con la FIA para probar este fin de semana unos nuevos pianos metálicos reemplazables, mucho más fáciles y rápidos de sustituir si se diese el caso. Se probarán en la curva 8 del Circuit para determinar su eficiencia.
Según el propio Servià, estos nuevos elementos evitarán que los pilotos recorten la curva: "En este tipo de curvas, a los pilotos de Fórmula 1 les son más interesantes ir por la hierba que por el asfalto. Así que hemos colocado estos ralentizadores, que pueden retirarse en las pruebas de motos, donde resultarían peligrosísimos. Aunque de momento no son más que un experimento para los test".