
"Después de Abu Dabi, pensé en dimitir," reconoce Domenicali. "Pero me quedo porque creo que soy capaz de aprovechar el trabajo de los últimos meses. No estoy apegado a mi asiento, pero llegué a la conclusión de que la renuncia sería un error".
Desde que sustituyó a Jean Todt al frente del equipo de Maranello a finales de 2007, la labor de Domenicali ha sido muy criticada por ciertos sectores de aficionados y el equipo italiano tan sólo ha conseguido el título de constructores de 2008 en estos tres años.