El piloto de Ferrari acumuló una gran cantidad de kilometraje, realizando un total de 105 giros al trazado de Yas Marina, en lo que describió como "un día positivo". El español declaró que los nuevos compuestos no deberían suponer un cambio drástico de comportamiento respecto a los Bridgestone de cara a la evolución del monoplaza de 2011.
"En general, ha sido un día positivo. No tuvimos problemas particulares con los neumáticos Pirelli y fuimos capaces de recopilar mucha información con la que trabajarán sus ingenieros", comentó el asturiano al finalizar los entrenamientos.
"Estamos contentos con la manera en que trabajamos y cómo fuimos capaces de adaptar los reglajes del coche para acomodarlo a los nuevos neumáticos, especialmente en lo referente al trabajo que podemos hacer en el nuevo coche en preparación para la próxima temporada. Por lo que hemos podido ver, el cambio de Bridgestone a Pirelli no debería ser problemático."
Fernando también habló sobre lo que se siente al volver a rodar en el trazado en el cual, hace sólo una semana, vio cómo se le escapaban las opciones de título: "Es normal que todos nosotros nos sintamos muy decepcionados, pero es parte del deporte.""Creo que es lo mismo que sentirían los jugadores de Holanda cuando perdieron el mundial en julio. Unas semanas después, se dieron cuenta de que habían conseguido algo, mientras que otros ni siquiera se habían acercado. Es lo mismo para nosotros: la victoria final se nos escapó, pero en cualquier caso tuvimos una gran temporada, con una fantástica remontada en la segunda parte del año. El año que viene lo intentaremos de nuevo, porque somos Ferrari."
Una vez finalizados los entrenamientos de Pirelli, la escudería Ferrari volverá a hacer aparición el próximo 28 de noviembre en el circuito Ricardo Tormo de Cheste, Valencia, con la celebración de las Ferrari World Finals. Allí, Felipe Massa y Fernando Alonso pilotarán el F10 para poner el punto y final a la temporada para el equipo italiano.
