Toro Rosso Honda ha dado muy buena imagen durante las dos semanas de test de pretemporada en Barcelona. La fiabilidad fue el punto fuerte de la filial de Red Bull, siendo la tercera escudería con más vueltas (822) por detrás de Mercedes (1039) y Ferrari (929). Con estos datos, desde la alianza italojaponesa muestran su optimismo de cara al inicio de año en Australia.
Franz Tost, director deportivo de Toro Rosso, considera que la cooperación con los japoneses ha sido muy positiva en todos los sentidos. El austriaco destaca que ha habido una buena comunicación desde el principio lo que ha facilitado el diseño y desarrollo del STR13. Por otro lado, Tost no tiene pelos en la lengua al criticar a los anteriores suministradores de motores que tuvieron ya que pocas veces les ayudaron. Sin embargo, con Honda, la historia ha sido totalmente distinta gracias a la continua colaboración por parte de ambas partes.Además, el responsable confiesa que Toro Rosso-Honda ya ha comenzado a trabajar en el diseño del monoplaza de 2019 para adaptar perfectamente el chasis con la unidad de potencia.
Tiempos nuevos en Toro Rosso
"En el pasado, cuando teníamos la unidad de potencia, los suministradores nos decían: 'mirad, este es el motor, con sus escapes, sus conexiones y ahora montadlo en el coche. Ahora, con Honda, ha habido una gran diferencia porque todo ha empezado desde el diseño del coche".
"Nuestros diseñadores se sentaron con los ingenieros de Honda y dieron el visto bueno para crear el tanque de la gasolina, por ejemplo, por delante del motor para que se adaptara lo mejor posible al chasis. O el sistema de escapes, ha tenido un gran impacto en la aerodinámica del coche. O, ¿qué hacemos con el aire caliente que sale de los radiadores? En muchas ocasiones, teníamos que encontrar la solución solos, pero ahora lo hablamos junto a Honda".
"Deberías haber visto las sonrisas de los ingenieros cuando regresaban del banco de pruebas con la caja de cambios y la unidad de potencia. Me contaban 'hey, podríamos cambiar los mapas sobre la marcha'. Antes lo teníamos, todo estaba en una caja negra y no podíamos hacer nada".
"Aunque les dijésemos 'quizás esto puede ir mejor', nos respondían 'usadlo y ya está'. Ahora tenemos impacto, podemos decirles 'mirad, intentemos esto de esta manera, quizá consigamos una mejora de rendimiento'. Esta cooperación ha ayudado a ambas partes y para Toro Rosso fue lo mejor".
Prematuro desarrollo del coche de 2019
"Espero mucho del monoplaza del año que viene. Hace un mes que ya empezamos a trabajar, tenemos muchas ideas sobre cómo adaptar las diferentes partes de la unidad de potencia con el chasis. Desde su posición, su faceta térmica, la aerodinámica o la distribución de pesos son factores importantes del coche".
