Todo comenzaba en la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Hungría 2015, cuando se producía un fallo en la suspensión trasera del VJM08B de Sergio Pérez que, en última instancia, haría que el monoplaza volcase y terminase del revés en la pista de Hungaroring. El equipo analizo el problema que sufrió el mexicano a fondo y no volvió a sacar a sus monoplazas durante esa jornada (no completaron ninguna vuelta en los Libres 2).
Incidentes sin consecuencias para los pilotos
El fallo en el VJM08B de Nico Hülkenberg se produjo en plena carrera, el alemán vio como el alerón delantero de su monoplaza se descolgaba y eso le condujo directamente hacia las protecciones de a curva 1. El incidente, al igual que el sufrido por Pérez en los Libres 1 del GP de Hungría 2015, no tuvo consecuencias físicas para el ganador de las 24 horas de Le Mans 2015. Así, en medio de un fin de semana marcada por la trágica muerte de Jules Bianchi, la F1 volvió a demostrar a los televidentes que las medidas de seguridad impulsadas por la FIA en las últimas décadas siguen funcionando y evitan lesiones graves.
"La fiabilidad y la integridad del diseño son dos de los puntos fuertes de Force India, y no creo que eso haya estado comprometido. Simplemente tuvimos poca suerte, fue un fin de semana en el que tuvimos un par de incidentes de importancia", señaló Fernley en declaraciones en exclusiva a la página web Autosport.
Bob Fernley reveló además que en el equipo ya han estado trabajando en los problemas sufridos en Hungaroring y que no espera que se deba cambiar el diseño de ninguna pieza del nuevo paquete: "Vamos a tener los todo terminado esta semana, y no esperamos nada importante. Podemos esperar un ligero fortalecimiento de las partes de las diferentes áreas y entonces estaremos bien".
