Después de su experiencia con Jean-Eric Vergne, Tost cree que se necesita tres temporadas para que un piloto se aclimate a la categoría: "¿Por qué digo eso? Llegas a la F1 y el primer año has de aprender a pilotar y a conocer los circuitos. No hablo de las curvas, ellos las conocen. Me refiero a qué vértice coger en los pianos en clasificación; luego en las tandas de clasificación, el sol brilla más, luego hace más frío...deben saber cuándo emplear más los neumáticos. ¿Cómo es el asfalto? Cambia en todos los lugares. No puedes esperar de un piloto que lo sepa todo en su primer año. No pueden saberlo todo".
Así pues, según indica el jefe de Toro Rosso, la experiencia es un grado que se va adquiriendo con el paso de las temporadas: "En el segundo año, prestas mucha más atención a diferentes cosas; aprendes el ambiente entero de la F1. En el tercer año, sabes que debes hacer esto, aquello y lo otro para tener éxito. Y, luego, estás preparado para pelear por victorias, mundiales, lo que sea. Ese es el motivo, pero es solamente mi idea personal".