Un ejemplo de lo que podría haber pasado cuando se revelaron las condiciones de la FIA fue que Michael Schumacher no habría estado cualificado para regresar al deporte en 2010, ya que no había competido en cinco Grandes Premios en las tres temporadas anteriores [el alemán abandonó la F1 tras la temporada 2006]. Sin embargo, la federación ha dejado claro que en circunstancias excepcionales es posible que el Consejo Mundial del Motor pudiera aceptar aplicaciones de pilotos que no cumplen estrictamente los requisitos.
"Uno de nuestros objetivos con el nuevo sistema de la superlicencia era evitar la multitud de excepciones que tendían a surgir en aquellos momentos. Por supuesto, si aparece una excepción, como el caso de Michael Schumacher, siempre tendríamos la posibilidad de consultárselo al Consejo Mundial del Motor", indicó un portavoz de la FIA.
Más claro, imposible
No obstante, la FIA no espera que esta situación se dé regularmente. Eso significa que los pilotos que actualmente están cualificados para obtener la superlicencia gracias a su kilometraje en F1, como Pascal Wehrlein [reserva de Mercedes] o Susie Wolff [probadora de Williams], no podrían competir en 2016 a menos que cumplan con los nuevos requisitos. Cuando se le preguntó a la FIA específicamente sobre estos dos pilotos si obtendrían la superlicencia aunque no contaran con los puntos necesarios o los Grandes Premios mínimos disputados, la federación señaló: "Entonces no podrían optar a una superlicencia completa para 2016".