En concreto, el presidente de la FIA se refiere a un grupo de personas que ha logrado reunir él mismo para investigar detenidamente lo que ocurrió en Suzuka antes, durante y después del accidente de Bianchi, y cómo debería de responder la F1. "Esperemos primero a los descubrimientos antes de juzgar nada", indicó el presidente de la federación.
El francés, además, comentó que algunos de los hechos del accidente "a posteriori parecen evidentes, pero el destino siempre puede acarrerar consecuencias dramáticas". Todt quiso añadir: "Como ya dije después del accidente, durante años hemos visto incidentes horribles sin consecuencias graves, pero eso no fue normal, fue un milagro. Nunca debemos dar nada por sentado o relajarnos en lo relacionado a la seguridad".