De estas nuevas normas, la principal constaría de implantar un nuevo sistema de control de velocidad en casos de bandera amarilla, para que así todos los pilotos que se encuentren en la pista, disminuyan su velocidad en los sectores que se encuentre el incidente. Por ello, y para que no haya más problemas en este aspecto, un control de velocidad automático, parecido al del carril de boxes, obligaría a todos los pilotos a reducir su velocidad en los puntos con bandera amarilla.
Otra propuesta que quiere estudiar la FIA, y que se discutirá mañana en dicha reunión convocada entre equipos y Federación, en Sochi, sería la de implementar más seguridad a las grúas que retiran los monoplazas en pista. Según Whiting, la mejor opción por ahora sería protegerlas de alguna forma para que no se volviera a repetir la situación de Suzuka. El británico, ha puesto como ejemplo un sistema parecido al de los camiones de carretera, que lo usan para que no se les metan debajo o por detrás los coches que circulan alrededor suyo.
Así pues, a la Federación Internacional de Automovilismo le toca ponerse a trabajar en nuevas medidas de seguridad relacionadas con estos dos ámbitos, a raíz del desgraciado accidente de Jules Bianchi en Suzuka. Mañana por la mañana, tal y como hemos dicho anteriormente, los once equipos de la parrilla se reunirán con las máximas autoridades de la FIA para discutir y empezar a estudiar estos sistemas de seguridad.
Charlie Whiting, director de carrera de la Fórmula 1:
"Tenemos algunas cosas que aprender y nuestro objetivo es involucrar a todos los equipos y a todos los pilotos para asegurarnos de que tenemos buenas ideas pensadas. Una de las cosas más importantes que tenemos que aprender es que probablemente tenemos que decidir si es mejor reducir la velocidad de los pilotos en situación de bandera amarilla. Lo mejor es intentar colocar un sistema en el que quede claro para todo el mundo, ya que pensamos que los coches podrían reducir su velocidad en circunstancias similares. En esto es lo que vamos a trabajar a partir de mañana por la mañana, con una reunión con todos los equipos para discutir exactamente esto. Queremos buscar la forma de intentar imponer un límite de velocidad, no será un límite de velocidad como tal, sino una manera de controlarla con completa certeza y claridad".
"La dificultad de tener límites de velocidad en un sector en concreto es que posiblemente tendrá que ser diferente para ciertos sectores. Lo que nos preocupa es el hecho de que ingenieros y pilotos expriman al máximo el límite de velocidad como el del pitlane; seguramente frenarían en el último minuto posible y reducirían al límite de velocidad en el punto preciso, porque así es la Formula 1 por naturaleza. La reducción sería la misma para todo el mundo. Sabrían qué hacer, todos tendrían el mismo mapa de referencia, así que todos tendrían que reducir la velocidad al mismo tiempo".
"Respecto a las grúas, no hay nada que podamos hacer. Todo lo que puedo decir es que las vamos a usar con precauciones extremas. Antes hemos estado casi una hora con los pilotos y una de las cosas que surgió, y que ha sido discutido y se volverá a discutir, fue rodear este tipo de vehículos. Es algo similar a lo que ves en los camiones de la carretera para evitar que los coches se les metan por debajo o por detrás. Eso es algo que necesitaríamos y lo vamos a considerar".