Sin embargo, el principal objetivo será probablemente encontrar alguna forma de mejorar el control de gastos para asegurar el futuro de los actuales once equipos. Los jefes de los equipos y la federación del deporte acordaron provisionalmente el año pasado introducir controles de costes más rigurosos en 2015, pero estaban sujetos a que los equipos acordaran unas mejores regulaciones. El problema clave que está en juego es especificar qué áreas de la actividad de equipo cubrirá el techo de costes, y se tiene esperanza que se llegue a un acuerdo en junio de este año.
Encontrar un acuerdo sobre el alcance del techo de costes que satisfaga a todos los equipos no será sencillo porque, si los límites se establecen demasiado alto para apaciguar a los equipos más grandes, entonces no tendría beneficio alguno para las escuderías más pequeñas que luchan por sobrevivir. Por su parte, Ferrari ha propuesto la idea de tener un techo de costes con diferentes estratos que tenga en cuenta las diferentes necesidades de los equipos fabricantes, que producen sus propios motores y suministran unidades a los equipos más modestos.
Equilibrio entre costes y ganancias
"Hemos puesto sobre la mesa una idea con la que, en vez de tener un mismo enfoque, hacemos algo diferente porque, para ser justos, estamos hablando de algo que solamente afectará a los equipos grandes, no a los más pequeños que están a punto de desaparecer. ¿Por qué no consideramos, por ejemplo, un enfoque en el que un equipo que pueda ganar una cierta cantidad de dinero pueda gastar una cierta cantidad de dinero? Luego, podemos mantener un equilibrio entre las ganancias y los costes para asegurarnos de que todos, con diferentes estructuras, pueden tener un enfoque que sea diferente teniendo en cuenta las diversas situaciones", señaló Stefano Domenicali, jefe de Ferrari, en Autosport.
Por otro lado, el jefe de Lotus, Eric Boullier, señaló que el problema definitivo no estaba en frenar los gastos de los equipos punteros, sino en asegurar que la estructura de costes no permita que solo unos cuantos equipos sean capaces de tener éxito. "Estamos lejos aún de tener algo firmado. En principio, tenemos que entender que hay quizás tres o cuatro equipos que pueden permitirse gastar el doble de presupuesto que el resto de la parrilla. Para mí, el problema no es que ellos gasten, porque cuanto más gasten, mejor para la F1 de alguna forma. Pero necesitamos tener una competitividad que permita a la mayoría de los equipos luchar por podios. Si tienes el mismo ganador, como ha pasado anteriormente, podría ser peligroso para la F1. Hemos de asegurarnos de traer cierta estabilidad al paddock y de que podemos tener más equipos involucrados en la lucha por el Mundial para que la competición sea emocionante".